• Los alumnos estrenarán los edificios el próximo curso

Gijón.- La Consejera de Educación y Universidades, Ana Isabel Álvarez, asistió esta mañana al inicio de las obras de construcción de los nuevos aularios del Colegio Público Ramón de Campoamor y del Instituto de Educación Secundaria Calderón de la Barca en Gijón que supondrán una inversión de más de 3,6 millones de euros.

Al acto asistieron, además, el Director General de Recursos Humanos, Centros y Autonomía de Gestión, Bernardo Martínez Llanos, el Concejal de Educación, Cultura, Juventud y Festejos, Carlos Rubiera, los Directores del CP, Ana María Blanco, y del IES, Alberto Roza, además de otros miembros de ambas comunidades educativas y responsables de la ejecución de las obras.

Durante el acto, la Consejera destacó el esfuerzo realizado por el Gobierno del Principado “para dotar a nuestros alumnos de las mejores instalaciones que les permitan desarrollar sus estudios de la manera más adecuada posible para que no haya ningún impedimento en el acceso al conocimiento y a una formación de máxima calidad”. Asimismo, la titular de Educación anunció que “si todo sale según el calendario previsto, ambos aularios estarán operativos en el inicio del curso 2012-2013”.

Dos aularios en un edificio único

El proyecto para el CP Ramón de Campoamor consiste en la construcción de un nuevo aulario de Educación Primaria, que se combina con áreas de administración y servicios, en sustitución del antiguo aulario derribado. Esa obra supone una inversión de 2.217.785 euros.

El edificio constará de 12 aulas repartidas en tres plantas: 4 aulas de desdobles, un aula de informática, una de uso polivalente, un aula de música, una biblioteca, tres tutorías y seis aseos para alumnos.

El área de administración se dotará con un despacho de dirección con sala de espera; una secretaría; dos espacios destinados a conserjería, control y reprografía; una sala para la Asociación de Padres; una sala de profesores; un aula de atención psicológica, otra aula de diversidad y 3 aseos para profesores. El área de servicios constará de 1 zona de almacenaje, un cuarto para la calefacción, y dos cuartos de contadores y basuras.

Se trata de una edificación longitudinal, adyacente al actual colegio público, y situada en la parcela contigua a la que se ha reservado para el nuevo aulario del IES Calderón de la Barca, que cuenta con un presupuesto de 1.433.313 euros. Ambos aularios, el del colegio y el del instituto, conforman un edificio único, dividido solo interiormente.

Si bien ambos edificios tienen funcionamiento y gestión autónomos, la concepción urbana es de un único edificio cuyo volumen, escalonado, desciende desde la altura de 5 plantas del IES Calderón, en un extremo, hasta la única planta del CP Campoamor, en el otro.

El nuevo edificio del Ramón de Campoamor se separa del edificio actual más de 6 metros. En este espacio se habilitará un sistema de rampa y escaleras que posibilitará la conexión entre los edificios nuevo y antiguo, en dos niveles diferentes y atendiendo siempre a criterios de accesibilidad, y que gracias a un vestíbulo de nueva creación se establecerá como la zona de entrada al colegio.

Por su parte, el nuevo aulario del IES Calderón de la Barca se separa más de 10 metros del actual edificio. Para el espacio entre ambas construcciones se ha diseñado un sistema de rampa y escaleras que posibilitará la conexión entre ambos edificios, todo ello bajo un juego de marquesinas metálicas que protegerán de la lluvia y que conferirán a este espacio imagen de entrada y acceso al instituto. El proyecto prevé la construcción de 17 aulas de secundaria, cuatro departamentos y tutorías, cuatro aulas de apoyo, 6 aseos y 2 cuartos de instalaciones.

En la cara sur de ambos aularios, el escalonamiento de la construcción permitirá alojar un patio cubierto, prolongación del patio descubierto. Esta zona estará equipada con mobiliario de obra que permitirá la reunión de grupos de amigos durante los recreos en un espacio con sombra y protegido de la lluvia. Se satisface con esta decisión una petición de las direcciones de los centros.

Se han proyectado en ambos aularios espacios diáfanos, flexibles y de fácil reutilización además de ventilados, con zonas abiertas y soportales que favorecen la relación social. Además, se han buscado materiales y soluciones constructivas durables y que minimizan al máximo el gasto en mantenimiento y se han tenido en cuenta todas aquellas actuaciones que convertirán estos edificios en completamente accesibles.