Asturias está comprometida con la divulgación de la tecnología entre los estudiantes y el apoyo para la promoción de la igualdad de género entre los más jóvenes. Hace poco hemos conocido que, para el próximo año, el currículo asturiano de la ESO para los estudiantes de tercero, incluirá una asignatura de libre configuración en Igualdad de Género. Con ella, se pretende que en las aulas pueda hablarse de los estereotipos en la legislación, el papel de la mujer a lo largo de la historia o la violencia sexual. La asignatura tendrá una hora a la semana y estará en la mano de los institutos el poder implantarla y tendrá como objetivo poder educar y llevar a la reflexión sobre las desigualdades entre sexos a estudiantes entre 14 y 15 años que serán los hombre y mujeres del futuro.
También en estos últimos días, nos llegó la noticia de cómo Asturias se ha unido al proyecto Escuelas Conectadas en el que se han invertido unos 6,5 millones para que 391 centros educativos asturianos puedan tener una conexión a internet ultrarrápida para este año. Con este proyecto, Asturias da una muestra más de su compromiso con la tecnología en las aulas que haga fuerza para evitar que exista una desconexión en las zonas rurales y más despobladas.
Con este propósito de apostar por la igualdad y la tecnología en los centros educativos, el programa Diana se presenta como un intento de aunar los dos y poder sacar el mejor partido de ambos mundos. El Ministerio de Igualdad a través del Instituto de la mujer, ha desarrollado este proyecto para acercar la tecnología al talento femenino de las escuelas y despertar el interés entre las estudiantes. El proyecto se desarrolla por toda España y en Asturias han sido dos los colegios elegidos, entre ellos el de Llaranes en Avilés, para participar en los talleres que tienen dos horas de duración. En ellos, las participantes conocerán el lenguaje de programación Scratch con el que aprenderán a diseñar sus propios juegos y aplicaciones para luego comentar sus experiencias con profesionales de la tecnología.
Con el proyecto Diana se pretende romper estereotipos de género relacionados con la tecnología, ámbito que parece tener más seguidores entre los niños, para que las niñas puedan sentirse atraídas también por la resolución de problemas con herramientas informáticas o con el pensamiento lógico abstracto que abundará en las profesiones del futuro.
Fuente: Edukame
El pasado abril, el CTIC dio otro paso en ese sentido con la celebración, un año más, del Día de las Chicas en las tecnologías, al que se unieron un grupo de asturianas cuya profesión está relacionada con el desarrollo tecnológico. Su participación tenía como objetivo reducir la brecha de género entre lo estudiantes y poder hablar de su experiencia laboral para servir como ejemplo a las generaciones futuras. Este proyecto se desarrolló dentro del programa 'Visita a la Milla del Conocimiento' dentro del marco 'SmartKids' creado por el ayuntamiento de Gijón y, también, dentro del espacio Oviedo Emprende.
Fuente: Fundacionctic
Estas iniciativas ayudan a que el sector tecnológico deje de estar protagonizado, únicamente, por los hombres y puedan crecer los proyectos liderados por mujeres. De hecho, en la actualidad hay 7 millones de personas que trabajan en este sector y solo hay un 30% que son mujeres, y mucho menos procentaje cuando se tratan de puestos de responsabilidad. En la actualidad las TIC genera unos 120.000 puestos anuales y se piensa que para el 2020 faltarán unos 900.000 empleos cualificados, por lo que hay grandes oportunidades laborales en este sector para el futuro donde las mujeres pueden adquirir un papel importante.
La tecnología está presente desde el principio en los jóvenes, por lo que parece imprescindible que le demos la importancia que realmente tiene. La Unión Europea ya ha tomado notas sobre esto y va a impulsar un plan en el que la educación pueda desarrollarse con mayor efectividad y se modernice gracias al uso de datos. El Plan de Acción de Educación Digital tiene, entre otros objetivos, el eliminar las diferencias digitales que hay entre unos y otros y ayudar a que todos estudiantes tengan una conexión de calidad. Además, pretende que en la educación superior la tecnología ayude a la cooperación entre centros y que haya clases de programación que ayuden a que el sector sea más igualitario.
A pesar de que hay consciencia de la importancia de la tecnología y de iniciativas como las que se están mostrando en Asturias, aún hay un largo camino por recorrer para lidiar con la brecha de género. Por eso, es importante que continuen los proyectos que promocionen la representación femenina en diferentes ámbitos cercanos a la vida de los jóvenes. Los deportes y los juegos son ejemplos de cómo los logros de las mujeres se consideran irrelevantes. Sin embargo, son muchos los ejemplos de ganadoras que pueden ser modelos para los dos sexos como Ana Oliveiras, que fue jugadora de e-Sport y ahora creadora de la primera Nations Cup de Counter Strike del mundo, o Leo Margets, que comenzó jugando en la sala online de torneos de poker 888 y que acabó patrocinando a la jugadora por torneos de todo el mundo hasta ser uno de los mejores ejemplos del poker español. Por su lado, el deporte femenino español no para de recoger éxitos, sin embargo, no se le presta tanta atención como al masculino. Por eso, hay que recibir con los brazos abiertos iniciativas como el del Real Sporting de Gijón que se ha propuesto apostar por la promoción de la sección femenina.
