Siria: la revuelta árabe que no eclosiona

Siria: la revuelta árabe que no eclosiona

La violenta represión contra el levantamiento prodemocrático en Siria continúa. Algunos activistas por los derechos humanos cifran en más de mil las víctimas que las protestas se han cobrado, desde que comenzaran a mediados de marzo. La cuestión es si la Unión Europea hace todo lo que está en su mano para acabar con la violencia. Defensores de los derechos humanos señalaron en una audiencia celebrada el pasado 26 de mayo que, además de ayuda, se necesita que la UE endurezca sus medidas.

 

La audiencia se produjo unos días después del encuentro que mantuvieron los ministros de Asuntos Exteriores en el que se decidió prolongar las sanciones contra Siria, incluyendo el embargo a la exportación de armas. El presidente Assad y diez personas más fueron incluidos en la lista de funcionarios sirios a los que se les aplica la prohibición de viajar y la congelación de activos. Además se decidió suspender la preparación de los programas de cooperación bilateral entre la Unión Europea y el país árabe.


La resolución que el Parlamentó Europeo aprobó el pasado 11 de mayo, tras el debate mantenido con la Alta Representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Catherine Ashton, exigía "duras sanciones contra el régimen sirio con el objetivo de lograr un cambio en la política del régimen".


Medidas insuficientes


El eurodiputado británico Charles Tannok, de los Conservadores y Reformistas Europeos, afirmó que "Siria ha aprendido la lección de la primavera árabe" y criticó el escaso efecto de las medidas que la UE ha aplicado, calificándolas de "fachada".


Tannok también advirtió de que se pueda acusar a Europa de aplicar un doble rasero, ya que la intervención militar en Libia dista mucho de la respuesta dada a Siria. El eurodiputado también se refirió al poder de la comunicación global, de la que dijo "es muy difícil de detener. Las dictaduras ahora se ven obligadas a combatir elementos que hace 30 años no existían, como las imágenes tomadas con móviles, por ejemplo, que podrían ser consideradas como pruebas en su contra".


El activista por los derechos humanos Haytham al-Maleh, de 80 años de edad y nominado al premio Sájarov en 2010, ilustró con su ejemplo las palabras de Tannok. Al-Maleh participó en la audiencia vía Skype para hablar a la subcomisión de Derechos Humanos (DROI) sobre los arrestos, torturas y asesinatos de gente inocente en Siria. El régimen es "una dictadura fascista que debe desaparecer y no existe ninguna otra manera en la que nos podáis ayudar", señaló.


Más de 1.100 civiles asesinados


En el encuentro mantenido en Bruselas también participó, in situ, el propio hijo de al-Maleh, Iyas Maleh, quien aseguró que, desde el 15 de marzo, más de mil personas han muerto y otras once mil han sido detenidas en prisiones e, incluso, en estadios deportivos. La organización siria Sawasiah, defensora de los derechos humanos, anunció recientemente que pueden verificar el asesinato de 1.100 civiles.


Iyas Maleh, que considera insuficientes las sanciones puestas hasta ahora, apuntó que "no existe diálogo posible con este régimen". Para Maleh es momento de expulsar a los embajadores sirios o de que el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas emita una resolución, aunque tampoco descartó la posibilidad de recurrir a la Corte Penal Internacional.


Desde Beirut, por vídeo conferencia, Nadim Houry, de la organización Human Rights Watch, explicó que una de las claves del problema es la ausencia de un interlocutor de confianza, que permita a ambas partes entablar un diálogo.


Metin Kazak se preguntaba si Turquía podría jugar ese papel. También expuso la necesidad de que los activistas por los derechos humanos que han huido de Siria reciban la ayuda necesaria para encontrar un "lugar seguro" donde permanecer.


Repaso de los hechos


Las protestas comenzaron a mediados de marzo y se inspiraron en las revueltas de Túnez y Egipto, aunque en las calles de Siria no se llegó a congregar el mismo volumen de gente que en estos dos países. Los movimientos comenzaron en varias ciudades, con Daraa como principal foco y con la capital, Damasco, en estado de relativa calma.


En mayo las protestas fueron a menos debido a la contundente respuesta del ejército y las fueras policiales sirias. Daraa, Homs y Baniyas fueron sitiadas por el ejército y el 9 de mayo las fuerzas de seguridad sirias realizaron arrestos masivos.


No obstante, el 20 de mayo se produjeron las mayores revueltas y acabó siendo el día más sangriento desde que comenzaron las protestas en marzo. La policía y fuerzas de seguridad dispararon a varios manifestantes; las organizaciones de derechos humanos contabilizaron entre cuarenta y cincuenta heridos.


Siria


Población: 22.5 millones

Capital: Damasco

Superficie: 185.180 kilómetros cuadrados

Presidente: Bashar Al-Assad, desde el 2000

Diversos grupos religiosos y étnicos


31 de mayo: chat en Facebook sobre las revueltas árabes


El martes 31 de mayo, la eurodiputada socialista portuguesa Ana Gomes participará en un chat sobre las revueltas árabes, donde analizará el significado de las mismas, el papel de la Unión Europea y otros asuntos relacionados.

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