Escribo este artículo a mediodía, mientras colas de militantes socialistas acuden a depositar su voto en las urnas de las que saldrá el nuevo secretario general del PSOE. Con este tema de las primarias creo que el control del histórico partido se le ha escapado al aparato de Ferraz. El caso es que mi espía preferida, la XP XIII, me adelanta que será el madrileño Pedro Sánchez el nuevo secretario general de los socialistas, solo había que ver la cara de Susana Díaz, con profundas ojeras, cuando acudió a su sede en Utrera para votar y el poco ánimo en sus declaraciones a los medios. Si mi espía preferida acierta todo un nuevo panorama político se abrirá en nuestro país y también en Asturias ya que de ganar Pedro Sánchez la posición del secretario general de la FSA Javier Fernández, desde hace meses presidente de la gestora y decidido apostante por el triunfo de Susana Díaz, quedará muy comprometido. Y es que, amigos, a partir de mañana no todo va a seguir siendo igual en el PSOE.

Creo que la lozana andaluza, mitinera donde las haya, se equivocó en su campaña pro secretaría general. Apoyarse en el aparato no va a serle suficiente cuando enfrente se tiene el voto individual del militante de a pié, quemado como está con los barones y compañía. Precisamente mañana se cumplen los dos años de legislatura municipal y autonómica en Asturias y los problemas endémicos del Principado continúan sin resolverse con un endeudamiento además que supera los 3.000 millones de euros. La Administración de Javier Fernández a la chita callando recorta como en el caso de medicamentos que el SESPA rechaza por su coste a petición de lo especialistas pero que, sin embargo, el paciente puede disponer de ellos en la sanidad pública de autonomías vecinas que tampoco tiene el céntimo sanitario ni el impuesto de sucesiones, por citar.

En infraestructuras tenemos una comunidad paralizada por las Administraciones central, autonómica y municipal. Vergenza debiera de darles a nuestros dirigentes el tema de las nuevas estaciones de ferrocarril en Gijón, o el soterramiento de las vías de FEVE a su paso por Langreo. Del AVE ¿Qué les puedo decir?. Otra vergenza. Oviedo continúa siendo con tripartito o sin él una ciudad estancada con los terrenos de la antigua fábrica de La Vega sin resolver al igual que pasa con los del viejo HUCA y aledaños, incluída la plaza de toros y el vetusto cuartel de la Policía Nacional. Con un palacio de congresos desaprovechado por lo dificultoso de su utilización es el auditorio Príncipe Felipe quien lo mismo sirve para un roto que para un descosido cuando debería ser su única función la de acoger conciertos y no congresos de sindicatos o partidos políticos.

Sobre la planificación del área central metropolitana no se ha dado ni el más pequeño paso y el puerto de El Musel continúa sin lograr esa modesta autopista del mar con Francia además de tener los terrenos anejos de la Zalia sin inquilinos. El peaje de la autopista del Huerna sigue inamovible pese a lo prometido en su día por la Administración central y nuestros parlamentarios le dan a la lengua en intervenciones en muchos casos ajenas al interés del ciudadano. Veteranos políticos como Antonio Trevín o Vicente Alvarez Areces parecen sirenas varadas en instituciones como el Congreso el Senado apoyándose en el aparato para no perder un sustancioso sueldo oficial además de la inmunidad por lo que pueda pasar. Asturias ¿Hacia donde vas, triste de ti?. Como el Sporting, y me temo también que como el Real Oviedo, a segunda división.