Asturias.-La presidenta de FORO, Cristina Coto, presentó hoy en rueda informativa a los medios de comunicación el Plan de Fomento de la Natalidad que impulsará en la Junta General del Principado, argumentando que “Asturias sufre un gravísimo problema demográfico, es de hecho la Comunidad Autónoma en la que más disminuye la población de toda España, en términos relativos, motivo por el que presenta las peores cifras de natalidad desde 1983. Y quiero subrayar esta fecha, 1983, porque refleja que los sucesivos gobiernos socialistas llevan 35 años sin tomar ninguna medida para frenar esta sangría”.

“A pesar –indicó Coto- de la gravedad del problema, la única medida de  Javier Fernández en seis años no fue constructiva sino destructiva al suprimir el ‘Cheque-Bebé’, una ayuda directa a la maternidad implantada por el gobierno de FORO en 2011, que eliminó sin sustituirla por medida alguna. Ahora, 5 años después nos han presentado un mamotreto denominado ‘Plan Demográfico del Principado de Asturias 2017-2027’, sobre el que hago un primer matiz, el año 2017 ya  ha pasado y para el 2018 no había ni un céntimo de euro en el fallido proyecto de presupuestos de Javier Fernández, lo que ya confirma el camelo de dicho documento; pero es que este Pacto es un ‘volcado’ de medidas deslavazadas que no contempla ni una sola ayuda directa por maternidad o por hijo, al contrario de lo que hacen los principales países europeos. Y quiero decir que por aquí va el futuro y las medidas que en el presente que están logrando revertir las tendencias demográficas en Europa”.

Por ello “FORO vuelve a  proponer un Plan de Fomento de la Natalidad basado, entre otras medidas, en ayudas directas de 150 €/mes por hijo hasta los 18 años, que son las más eficaces y urgentes para estimular la natalidad en Asturias. Es una realidad, la natalidad requiere estabilidad económica y, además del empleo, las ayudas directas son las únicas que generan esa estabilidad económica”.

La realidad, según expuso Cristina Coto, “es que Asturias cuenta con una población envejecida y decreciente, que impide vislumbrar un futuro de crecimiento económico y generación de empleo. Y les quiero citar los datos del Instituto Nacional de Estadística recogidos en la ‘Estadística del movimiento natural de la población’ publicada el pasado 12 de diciembre: en el primer semestre de 2017 respecto al primer semestre de 2016 los nacimientos cayeron en Asturias un 7,4% frente al aumento en las defunciones del 1,8%; pero es que si analizamos los datos referidos al año 2016 nos encontramos con que Asturias aparece con los peores indicadores demográficos de toda España, la tasa de mortalidad más alta del país (12’73 defunciones por cada 1.000 habitantes) y la más baja de natalidad (6’12 nacimientos por cada 1.000 habitantes) que es el mismo camino que llevamos para 2017 a la vista de la evolución del primer semestre. El declive demográfico es, por lo tanto, nuestro primer problema y compromete seriamente el futuro de nuestra región”.

“Hay concejos –añadió la presidenta de FORO- especialmente dañados por esta crisis, los más despoblados son precisamente los que más habitantes pierden; el INE certifica que los dos municipios menos poblados de Asturias, Yernes y Tameza y Pesoz han experimentado las mayor caídas de población en 2016, con un 9,68% y 8,24%, respectivamente. Qué decir del Suroccidente, casi en su totalidad pierde habitantes por encima de un 2%, y también lo hacen cuatro de las diez comarcas mineras, Caso, Sobrescobio, Riosa y Aller, y tres del oriente interior”.

Cristina Coto abundó en el tema del empleo porque “es evidente que es vital para estimular el crecimiento de la población y favorecer su localización pero el fomento de la natalidad es otra condición imprescindible, determinante para asegurar ese crecimiento de la población. Por ello son necesarias medidas de carácter estructural que incentiven la natalidad y permitan que, tanto a corto como a largo plazo, se invierta la tendencia de pérdida de población. Y eso es algo que han demostrado los planes elaborados y desarrolladas por los principales países europeos de nuestro entorno. Quiero referirme siquiera brevemente a ellos:

Francia, por ejemplo, dispone de un sistema de protección social que comprende primas por nacimiento o adopción de hijos, supeditado al nivel de renta cuyo importe asciende a 927,71 € por hijo nacido y a 1.855,42 € por hijo adoptado; subsidio básico para sufragar los gastos derivados del mantenimiento y la educación del niño y prestaciones mensuales que permiten que el padre o la madre suspendan o reduzcan su actividad profesional para atender a su hijo. En este sentido los importes aprobados  hasta marzo de este año 2018 van desde los 146,94 euros al mes hasta los 394,06 euros, en función de la reducción de horas de trabajo.

En Alemania cualquier persona con niños que viva en el país tiene derecho a beneficios familiares. En este sentido se contemplan los denominados subsidios familiares que son abonados  a niños menores de 18 años de edad de forma incondicional; entre 18 y 21 años si están desempleados y registrados como demandantes de empleo; de 18 a 25 años si están en la escuela profesional, en voluntariado social o ecológico o cuando no han empezado su formación profesional, y para los mayores de 25 años por razones de servicio militar o civil. Las ayudas alcanzan los 192 euros por hijo y mes para los dos primeros, 198 euros/mes para el tercero y 223 euros/mes por cada hijo adicional, más allá del tercero.

Asimismo, se abona el denominado subsidio parental a los padres que no trabajan o lo hacen a tiempo parcial (hasta 30 horas a la semana) porque quieren cuidar a sus hijos durante los primeros meses de vida. El importe abonado depende de los ingresos de la familia y en lugar de, o además del subsidio parental, los padres que lo deseen pueden solicitar el subsidio parental ‘plus’ que les permite combinar mejor el subsidio con el trabajo a tiempo parcial. El importe abonado por este concepto no puede ser inferior a 300 euros ni superior a 1.800 euros al mes y las familias numerosas reciben una bonificación equivalente al 10% de la asignación parental, sin poder ser inferior a 75 euros/mes.

Entre los países del norte de Europa, merece ser destacado el caso de Finlandia, donde conceden un pack de ayudas a la maternidad que contempla en primer lugar y por nacimiento la suma única de 140 euros o el denominado ‘paquete de maternidad’ que contiene lo necesario (ropa de bebé, ropa de cama, pañales, etc.) para el niño. Asimismo se abonan subsidios por el cuidado de los niños en el hogar que pueden tener carácter parcial o flexible cuando el padre que trabaja reduce su tiempo de trabajo; también se presta ayuda mensual para el abono de las guarderías. En concreto se conceden primas por hijos de 535 marcos finlandeses/mes para el primero, 657 marcos finlandeses/mes para el segundo, 779 marcos finlandeses/ mes para el tercero, 901 marcos finlandeses/mes para el cuarto”.

Cristina Coto resaltó que “todas estas medidas incluyen ayudas directas por maternidad y por hijo, entre otras, van dirigidas a ayudar a las familias que deseen tener hijos. La primera preocupación es la natalidad, porque resulta contradictorio preocuparse por la gratuidad de la enseñanza de 0-3 y olvidarse de que son ayudas inútiles si antes no nacen en Asturias esos niños, como inútil por vacío es el llamado ‘Pacto Demográfico del Gobierno de Asturias’, que ni siquiera viene acompañado de la dotación presupuestaria precisa”.

Añadió que “no podemos olvidar los imprescindibles incentivos fiscales para las familias y el apoyo decidido a la conciliación de la vida personal, familiar y laboral, impulsando la flexibilidad de horarios y el teletrabajo, tanto en el ámbito público como privado, asesorando e incentivando a las empresas que apuesten por una mayor conciliación y faciliten el acceso al mercado laboral a las mujeres que tengan a su cargo el cuidado de hijos”.

“Así pues –expuso Cristina Coto- y basados en el convencimiento de que el apoyo económico directo a la natalidad es una condición necesaria para impulsar el crecimiento demográfico en Asturias y que la maternidad no sea  causa de discriminación laboral en el empleo actual o en la búsqueda de uno nuevo, FORO propone, en línea con las medidas implantadas en los países europeos de nuestro entorno, un Plan de Fomento de la Natalidad que comprenda, entre otras:

Ayudas directas a la maternidad:

Un subsidio de 150 euros mensuales por hijo nacido hasta que cumpla los 18 años,  con un horizonte de 5 años prorrogable por periodos sucesivos. Les decía que este es un modelo de inspiración europea; bien, en línea con Europa, nuestro Plan tiene un horizonte de 5 años prorrogables, inspirado en el de  Alemania donde se conceden 192 €/mes para el primer y segundo hijo; 198 €/mes para el tercero; y 223 €/mes por cada hijo adicional.

Deducciones fiscales aplicables en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas, en aras de una mayor flexibilidad en el trabajo y horarios más razonables, así como favorecer la estabilidad en el empleo de la pareja.

La dotación económica estimada para el primer año asciende a la cifra de 10,8 millones de euros, cuyo importe se actualizaría de acuerdo con las previsiones de los años sucesivos.

También solicitamos la cofinanciación del Estado de los Planes de las diferentes Comunidades Autónomas, así como la adopción de medidas favorecedoras de la estabilidad en el empleo, mayor flexibilidad en el trabajo y en los horarios laborales de las parejas”.

Y finalizó afirmando que “en Asturias tenemos un presidente que prometió convertirnos en la Alemania de España, curiosamente en sus 5 años de gobierno nos hemos alejado casi 8 puntos de España, no de Alemania. Bien, pues si queremos ser Alemania tenemos que cambiar y hacer como los alemanes porque, si seguimos haciendo lo mismo, obtendremos el mismo resultado, como le gustaba decir a Einstein”.