A cara de perro

Estamos a punto de ser 7.000 millones los habitantes de este planeta llamado tierra y eso que aún el gobierno del Principado no ha puesto en marcha el cheque bebé. Lo que si llevamos camino de batir record en este país llamado España es en lo que se refiere al paro: Ya hay 4.978.000 ciudadanos sin trabajo y más de 1,4 millones de hogares en los que no entra ingreso alguno. Me comentan que a mediodía ya se forma cola delante de la Cocina Económica por falta de recursos de muchas personas que se ven obligadas a recurrir a esta ayuda para poder alimentarse. Comentándolo con el ex árbitro internacional y ex bancario Eusebio Alvarez hemos acordado acudir dentro de unas fechas a este servicio social y aportar nuestro granito de arena. Será la contra crónica al artículo que titulé “Jet society en el Reconquista”. ¿Habrá ido ya a conocer la Cocina Económica alguno de los candidatos asturianos a las elecciones generales del 20 de noviembre?. Lo que es seguro es que ayer no celebró en ella el vice consejero de Infraestructuras Juan Vega su 54 cumpleaños quien como regalo, supongo, le ha caído en suerte otro consejo de administración, el de la Isla de innovación en Avilés. Al paso que va tendrá más consejos de administración que el mismísimo Fernando Masaveu. Sostengo, la verdad, que como al fin y al cabo lo suyo es la comunicación en su momento, cuando el gobierno de Francisco Alvarez-Cascos se haga con el poder en el ente público RTPA, Juan Vega pasará a ser director general de la misma -puede, sí, ser el gran tapado- dejando lo de las carreteras para alguien más experto. En todo caso la que va soltándose a base de ser interrogada poco menos que como en los tiempos de Claudio Ramos Tejedor por la oposición en la Junta General del Principado es la consejera de Fomento Isabel Marqués. Así, chiquilla, sin miedo debe andarse por la vida.

Día lluvioso para Mariano Rajoy en Avilés. Foto en la explanada del Niemeyer con los candidatos y acto poco menos que íntimo en el hotel de cinco estrellas Palacio de Fererra, el mismo donde suelen alojarse Kevin Spacey y Brad Pitt cuando se dan un garbeo por Galiana. No, no piensen mal, Mariano no pidió en momento alguno conocer al gerente del Niemeyer, el allerano Natalio Grueso, ni tampoco saludar a la alcaldesa socialista Pilar Varela. Sin embargo, debo felicitar a su ilustrísima, a la alcaldesa; por fin le ha metido mano al mercadillo del barrio de La Texera, en donde tengo un piso heredado de mi padre, y que durante años ha estado en el más completo de los abandonos, habiéndose convertido en un nido de ratas. Para que luego digan, no todo va a ser para el Niemeyer ni para el saxo, que no sexo, de Woody Allen.

La verdad es que de un tiempo para acá los populares le han cogido un gusto al Niemeyer y a Avilés que me resulta hasta sospecho. Y es que ese cerebro político, y futurible presidente del PP asturiano, Joaquín Arístegui es sabedor que la sociedad avilesina está dando la espalda a FAC mientras que el PSOE local tiene muchos líos internos. Avilés, claro, es el tercer concejo en población de Asturias y, por tanto, un importante granero de votos.

En cuanto pase el 20 N y el Partido Popular de Asturias tenga que celebrar su congreso regional saldrán a relucir de nuevo navajas, máxime si tocan poder como así parece. ¿Quien optará a la presidencia?. Aquí les brindo tres nombres: Isabel Pérez Espinosa, Joaquín Arístegui o Gabino de Lorenzo. Lo que si me sorprende es la actitud que está adoptando el candidato de Foro Asturias al Congreso Enrique Alvarez Sostres negándose a asistir a un debate en la Universidad de Oviedo sobre temas de educación que es lo suyo. Si estuvieron, por contra, sus tres contricantes: Mercedes Fernández, Antonio Trevín y Gaspar Llamazares que vuelve a redescubrir donde está la estatua de Valdés Salas. Si nuestros políticos no tuvieran tanto miedo a los medios de comunicación y al que dirán lo lógico sería que la televisión autonómica organizase un debate a cara de perro entre los candidatos de los cuatro partidos con representación en el parlamento regional pero ¿Cuanto se apuestan a que es que no?. Si no les conociéramos



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