Asturias (E.P.).-La Consejería de Sanidad ha advertido este miércoles de que dejar de fumar y evitar la exposición al humo de tabaco son las medidas más eficaces para evitar la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), un término que designa diversas dolencias que limitan el flujo de aire en los pulmones y que son más conocidas como bronquitis crónica o enfisema pulmonar. Sanidad ha realizado esta recomendación con motivo de la celebración del Día Mundial de la EPOC.

   Según el director de Área de Gestión Clínica de Neumología del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) y director del Instituto Nacional de Silicosis, Pere Casán, la EPOC es "la manifestación clínica de queja de los bronquios frente a la inhalación del humo de tabaco. Otras manifestaciones ocultas y que aparecen con el tiempo son el cáncer de pulmón y la patología coronaria".

   Casán ha recordado que la factura "más cara y más nefasta" que pasa el consumo del tabaco "se va preparando con el tiempo y cuando aparece, pasamos a engrosar la larga lista de enfermos respiratorios crónicos".

   Reducir los factores de riesgo comunes de las enfermedades crónicas como la alimentación no adecuada y la inactividad física, favorecer entornos libres de humo y facilitar un diagnóstico y un tratamiento correctos de aquellas personas con sospecha de EPOC son claves para reducir la aparición de casos.

   Con motivo del Día Mundial de la EPOC, Salud Pública recuerda que el humo del tabaco (fumadores activos y pasivos) produce el 90% de los casos, si bien existen otros factores de riesgo, como la contaminación del aire por partículas y ciertas sustancias químicas. Por ello, la mayor parte de las acciones preventivas para evitar la aparición de la enfermedad y para frenar su progresión se articulan en torno al abandono del tabaco.

   En España, la EPOC afecta al 10,2% de la población adulta, y representa el 40% de las consultas en los servicios de Neumología. El estudio IBERPOC estima que en nuestro país hay más de 1,2 millones de personas afectadas entre 40 y 69 años. Estas cifras conllevan un importante gasto público en fármacos y terapias respiratorias domiciliarias. Sin embargo, la EPOC es poco conocida por la ciudadanía, lo que explica que existan muchos casos no diagnosticados hasta fases avanzadas, cuando aparecen las limitaciones y complicaciones para la persona que la sufre.

PREVALENCIA EN ASTURIAS

   Según datos del Sistema Nacional de Salud, la prevalencia declarada en Asturias para el año 2012 fue mayor que la media para España: 4,73% frente a un 3,75% (tanto en hombres como en mujeres).

   En la actualidad, la EPOC afecta casi por igual a ambos sexos, en parte debido al aumento del consumo de tabaco entre las mujeres de los países de ingresos elevados. Concretamente, en relación con el consumo de tabaco en nuestra comunidad autónoma, algo menos de un tercio de los asturianos de quince  y más años se declara fumador. Un 29,1% de la población asturiana entrevistada reconoce fumar y de ellos, el 25,4% lo hace diariamente y el 3,7% manifiesta hacerlo de manera ocasional.

   La presencia de EPOC se confirma con una prueba diagnóstica simple en el sistema público de salud que se llama espirometría y que mide la cantidad y la velocidad del aire inspirado y espirado. Como tiene una evolución lenta, generalmente se diagnostica en personas de 40 años o más.