Los ponentes Esther Prieto, Luis Luna y Eloy Moreno trataron sobre el debate entre libro electrónico y en papel.
El especialista de especialista en la Ley de Propiedad Intelectual, Juan Barthe, explicó a los escritores noveles sobre los peligros de no estar bien asesorados en materia legal
Gijón.-.- El segundo día del II Congreso de Escritores Noveles ha centrado sus ponencias en la dicotomía existente entre el libro digital y el papel por una parte y la necesidad de una correcta asesoría legal para los escritores por la otra.
En primero lugar se celebró una mesa redonda en la que participaron Esther Prieto, codirectora de Ediciones Trabe y Eloy Moreno, escritor a punto de lanzar su segundo libro al mercado y que fue moderada por Luis Luna, filólogo.
En ella se debatió sobre la coexistencia del libro digital y el de papel. Las ventajas de los digitales son el mayor beneficio económico para los escritores por una parte y la facilidad de distribución por otra, aunque también se destacó que el gran peligro de ese formato es la piratería que es “robar el alimento de los escritores”.
“E-Book y libro de papel están condenados a entenderse ya que son realidades que coexisten al mismo tiempo y mercados complementarios, por lo que hay que lograr encontrar el punto medio en el que ambos puedan sobrevivir”, añadió Luis Luna.
Por su parte, Juan Barthe, abogado senior y especialista en la Ley de Propiedad Intelectual ha recomendado a los escritores noveles durante su ponencia que es importante contar con un asesor legal, y por si no fuera posible ha dado cinco consejos al respecto.
Ser consciente de con quién contratamos o, quien es la persona o sociedad que figura en el contrato, pues jurídicamente sólo ella va a ser la obligada; establecer claramente el alcance del derecho o derechos que se ceden al editor; por supuesto que el precio y su forma de pago queden claramente recogidos en el contrato; tener en cuenta la ley aplicable al contrato, pues hay contratos que se someten a legislaciones extranjeras sobre las que se tiene menos control y más desconocimiento; y valorar la posibilidad de incluir la obligación de indemnización en caso de incumplimiento por el editor.
Nota. Adjuntamos fotografías de Martín Valle Fotógrafos del congreso
