Coto: “La reforma del sector público no tiene intención de desmontar los 86 chiringuitos"

Coto: “La reforma del sector público no tiene intención de desmontar los 86 chiringuitos"

“Nuestra enmienda de totalidad responde a que las obligaciones adquiridas en el Plan Económico Financiero de Reequilibrio 2012-2014 son una mera excusa para disfrazar la falsa reforma”

·       “No se ahorran 33 millones de euros porque la Memoria Económica del Proyecto oculta el ahorro efectivo al basarse en meras elucubraciones, como por ejemplo la venta de las acciones de SEDES”

 

10-abril-2013 (Oviedo).- La portavoz de FORO en la Junta General, Cristina Coto, ha afirmado hoy que “Javier Fernández ha engañado a todos desde el mismo día de su discurso de investidura, prometiendo una reforma del sector publico que ha decidido realizar por entregas, para tratar de esconder la realidad de que lo único que se persigue es evitar abordar el problema dilatándolo en el tiempo”.

“El ejecutivo socialista decidió unilateralmente plantear la supuesta reforma a través de un erróneo modelo basado en tres leyes; sin buscar en ningún momento, pese a su minoría parlamentaria, el consenso o siquiera la opinión del resto del los grupos parlamentarios”, afirma Coto, que anunció que FORO ha presentado una enmienda de totalidad con devolución al Gobierno del primero de los textos.

Y es que para Coto “la reforma del sector público no tiene intención de desmontar los 86 chiringuitos que creó el gobierno de Areces, y consolida un despilfarro sectario que obliga a recortar aún más los servicios esenciales de los asturianos”.

“Nuestra enmienda de totalidad responde a que las obligaciones adquiridas en el Plan Económico Financiero de Reequilibrio 2012-2014 son una mera excusa para disfrazar la falsa reforma, sin afrontar la verdadera problemática del sector”, afirmó Coto.

“Es intolerable que sean los asturianos quienes estén costeando un sector público sobredimensionado con respecto a lo que necesita la Comunidad Autónoma, y con respecto a lo que la misma puede afrontar en el actual escenario de recesión económica”, añade.

Coto asegura que “el elevado número de sociedades, entes y fundaciones que se han ido creando a lo largo de los últimos Gobiernos socialistas no han dado respuesta a las verdaderas necesidades de los asturianos, convirtiéndose en entes burocráticos, ineficientes, clientelares y altamente politizados, impidiendo disponer de una Administración imparcial en la que los principios de legalidad, austeridad y transparencia fuesen la base de sus actuaciones”.

La diputada sostiene que “nada de esto soluciona este proyecto, pero además, no se ahorran 33 millones de euros porque la Memoria Económica del Proyecto oculta el ahorro efectivo al basarse en meras elucubraciones, como por ejemplo la venta de las acciones de SEDES”.

La portavoz de FORO fue muy crítica con la memoria económica que acompaña al Proyecto. “Es una tomadura de pelo; no permite conocer el ahorro efectivo que se acomete en esta primera fase de redimensionamiento del sector público autonómico; en ella se proporcionan datos de consignaciones presupuestarias correspondientes a varios de los entes afectados, pero no los que permiten cuantificar de manera objetiva el ajuste real que estas medidas producen en las arcas de la Administración Autonómica. Al respecto de las empresas en cuyo capital social participa el ejecutivo asturiano y que en este proyecto se contempla su venta, procede indicar, que el detalle de los valores netos contables que se reflejan en dicha Memoria no proporcionan un dato que resulta esencial, la cuantía que en su caso se espera obtener de su venta, y tampoco se detalla cual va a ser la gestión de su elevado endeudamiento”, argumenta.

“Si en toda actuación pública resulta indudable la eficiencia y el análisis pormenorizado de las diferentes alternativas posibles en aras de la rentabilidad social del gasto público, esto no se garantiza en el actual Proyecto”, añade.

Finalmente Coto subrayó que el contenido del proyecto de ley resulta “insuficiente. Su inconcrección, ambigüedad y superficialidad no solo impide evaluar el supuesto ahorro que, en su caso, implica; sino cómo se van a eliminar duplicidades, evitar burocracias o fiscalizar mejor los gastos, que son los otros objetivos esenciales de la reforma”.

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