Oviedo.-Hoy viernes se celebra el solemne acto de entrega de los Premios Príncipe de Asturias 2012, a las 18:30 horas en el Teatro Campoamor y tendrá una duración aproximada de 90 minutos. La ceremonia de entrega sigue el siguiente esquema: SS.AA.RR. los Príncipes de Asturias hacen su entrada, suena el himno nacional interpretado por la Banda de Gaitas Ciudad de Oviedo y da comienzo la ceremonia. A continuación, hacen su entrada los galardonados a los compases de la obra "Two ayres for cornetts and sagbuts", del compositor británico John Adson, interpretada en directo por un conjunto musical integrado por ocho instrumentos de viento metal. Una vez situados todos los premiados en sus lugares correspondientes, el Príncipe cede la palabra al presidente de la Fundación, quien hace un balance y resumen de lo que han sido las actividades de la institución durante todo el año. Tras su intervención, se procede a la entrega de los galardones, con la lectura de un pequeño fragmento de cada una de las actas de concesión. Los galardonados avanzan desde sus butacas hasta la mesa presidencial para recoger, de manos del Príncipe, el premio correspondiente. Habitualmente, tres de los galardonados ofrecen sus discursos, y es S.A.R. el Príncipe de Asturias quien cierra el acto con su intervención, considerado desde hace tiempo como el discurso más importante de todos los que pronuncia durante el año.Interpretado el "Asturias, patria querida", himno del Principado de Asturias, de nuevo por parte de la Banda de Gaitas, los galardonados abandonan el teatro y se da por concluida la ceremonia.
El ambiente en la ciudad
Los ovetenses vivirán esta edición de los Premios con sentimientos encontrados. Por un lado, el de quienes continúan valorando el atractivo que para la ciudad y para Asturias supone el 'tirón' de la ceremonia y los galardonados, que convierten a Vetusta por un día en capital informativa mundial, a los que se añaden hosteleros y comerciantes que, quién más y quién menos, agradecen la llegada de centenares de posibles clientes que son como un regalo caído del cielo en un momento de profunda crisis en el consumo. Por otro, quienes, no sin razón, contraponen a la ceremonia y las numerosas actividades desarrolladas en su entorno sus circunstancias laborales, su condición de parados, de 'ereizados' , de 'recortados' y otras circunstancias que los mueven a la protesta, pasiva o activa, como se podrá comprobar esta tarde en la vecina Escandalera.
FOTO: SAR Don Felipe en la ceremonia del pasado año. (Gentileza FPA)
