El peligroso mosquito 'tigre' se instala en España

El peligroso mosquito tigre se instala en España

UIB.-Un equipo de investigadores del Laboratorio de Zoología y del grupo de estudio de Enfermedades Emergentes del Instituto Universitario de Investigación en Ciencias de la Salud (IUNICS), ha confirmado la existencia en el municipio de Bunyola, en Mallorca, de ejemplares adultos activos y cercanos a posibles zonas de cría de esta especie exótica invasora. Los investigadores ya han informado del hallazgo a las consejerías de Salud, Familia y Bienestar Social y de Agricultura, Medio ambiente y Territorio del Gobierno de las Islas Baleares.

 

Según explican los investigadores, el mosquito tigre (Aedes albopictus) es una especie exótica invasora originaria del sudeste de Asia, que en las últimas décadas se ha expandido más allá de su hábitat natural y actualmente se encuentra ya en más de 25 países de todo el mundo. El mosquito tigre se detectó por primera vez en el Españal, en agosto de 2004 en Cataluña.

En los últimos años su presencia se ha extendido hacia Castellón, Alicante y Murcia y, ahora, también hacia Mallorca. Esta expansión se ha visto favorecida por el transporte global de mercancías, principalmente neumáticos, pero también de productos de jardinería y, posiblemente, también por el transporte de pasajeros, añaden.

 

Plaga urbana

El mosquito tigre mide unos 10 mm y se le reconoce por las rayas blancas de la cabeza, el cuerpo y las patas (de ahí su denominación). En su medio natural, este mosquito cría en las cavidades de los árboles, donde se acumula agua estancada, si bien se ha adaptado a las zonas urbanas, donde hace la posta en receptáculos artificiales en los cuales se acumulan pequeñas cantidades de agua (jarrones, canales, cubos, macetas...). Es un mosquito activo en las horas diurnas, si bien su actividad máxima se concentra durante el amanecer y el atardecer.

 

Es una especie con una elevada capacidad de colonización que, una vez establecida, es muy difícil de erradicar

Se trata, dicen los investigadores, de una especie con una elevada capacidad de colonización que, una vez establecida, es muy difícil de erradicar, sobre todo si se convierte en una plaga urbana. Resulta una especie muy molesta por las picaduras que producen las hembras que, como en el caso otros mosquitos, pueden provocar una reacción alérgica severa en personas especialmente sensibles.

A pesar de que esta especie se ha descrito como un vector transmisor de virus como el dengue o el Chikungunya, hasta el momento todavía no se ha detectado ningún tipo de transmisión de patógenos de importancia en el España. Así, el principal impacto de esta especie sobre la salud pública son las molestias ocasionadas por las picaduras, indican.

Recomendaciones
 
El equipo de investigadores de la UIB responsable del hallazgo destaca que la actuación inmediata de las autoridades competentes y la concienciación de la población son las herramientas indispensables para evitar la propagación del mosquito tigre hacia otros municipios.

En este sentido, creen necesario el establecimiento de una red de detección y seguimiento de la población del insecto mediante trampas para adultos y de ovoposición, a partir del foco que se ha localizado en Bunyola. Además, proponen realizar una campaña de prospección de los posibles lugares de cría y llevar a cabo una campaña de concienciación entre la población para evitar que se dejen recipientes donde se pueda acumular agua y tratar aquellos en los cuales se detecte la presencia de larvas de mosquito tigre. Los investigadores avisan que la época de lluvias de finales de verano y principios del otoño puede favorecer la proliferación de lugares de cría por esta especie.

 

Colaboración ciudadana

La detección de este foco de mosquito tigre, el primero que se localiza en las Islas Baleares, ha sido posible gracias a la colaboración ciudadana. Una vecina de Bunyola informó el pasado viernes el doctor Miquel Àngel Miranda, investigador del Laboratorio de Zoología y miembro del grupo de estudio de Enfermedades Emergentes, de la presencia de mosquitos inusuales en la zona.

Los investigadores de la UIB, que desde el año 2009 participan en un proyecto del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad para detectar el mosquito tigre, se desplazaron hasta el domicilio para recoger los ejemplares capturados. Una vez en el laboratorio de la UIB, los científicos han confirmado que la muestra se corresponde a cinco ejemplares hembra del mosquito y que es indicativa de la presencia a la zona de un número suficiente de mosquitos como para poder criar. Esta hipótesis se ha confirmado con una segunda visita a la zona, durante la cual los investigadores han detectado la presencia de numerosos adultos activos y cercanos a posibles zonas de cría.

 

FOTO: Ejemplar de mosquito tigre capturado por los investigadores de la UIB. Imagen: UIB

Dejar un comentario

captcha