El decreto establece un aumento de la jornada de trabajo del personal sanitario que repercutirá directamente en la ampliación de los horarios de atención a los usuarios y en la mejora de la calidad.

• Incluye la atención en jornada ordinaria de los programas especiales destinados a aligerar la lista de espera y otras necesidades asistenciales.

• “El escenario de crisis nos obliga a tomar decisiones con responsabilidad porque poner el sistema en riesgo sería aún peor”, asegura Faustino Blanco.

• El Hospital de Cabueñes pondrá en marcha un sistema de triage para mejorar la atención a los pacientes de urgencias y la organización de los profesionales.

Gijón.- El Consejero de Sanidad, Faustino Blanco, explicó en Gijón que el decreto que regula la jornada ordinaria en los centros e instituciones sanitaria del Servicio de Salud del Principado de Asturias (SESPA) ha sido pensado para preservar un modelo sanitario público, de calidad, equitativo y que además sea sostenible en el tiempo.

Este decreto establece un aumento de la jornada de trabajo del personal sanitario que repercutirá directamente en la mejora de la calidad de la atención a los usuarios ya que estos podrán ser tratados de forma programada tanto en los centros de salud como en los hospitales en un horario de atención al público más amplio y que incluye las tardes.

También supondrá un uso más eficiente de los recursos públicos puesto que permitirá atender en jornada ordinaria programas especiales, como los destinados a la reducción de las listas de espera, que antes se venían abordando al término de la actividad ordinaria y que generaban el pago de programas especiales a los profesionales.

La puesta en marcha de esta nueva organización profesional se enmarca en la Ley de Presupuestos Generales del Estado 2/2012 de 29 de junio que establece que la jornada general de trabajo del personal del sector público no puede ser inferior a 37 horas y media semanales de trabajo efectivo en cómputo anual.

Faustino Blanco explicó al respecto que “estamos en un momento en que hay que tomar decisiones y no podemos satisfacer todas las expectativas que tengan todos los profesionales o todos los trabajadores de la sanidad asturiana, pero tenemos  responsabilidades que atender”. El Consejero de Sanidad añadió que “sabemos que debemos dar respuesta al plan económico financiero del Principado acordado con el Gobierno de la Nación y este escenario de crisis es el que nos obliga a tomar decisiones no siempre fáciles, pero que son decisiones de responsabilidad”.

Sobre la posibilidad de que se convoque una huelga en la sanidad asturiana en el próximo otoño, el consejero expresó su deseo de que esta no se lleve a cabo y se comprometió a “hacer todo lo posible” para que esto no ocurra  aunque también fue claro al asegurar que “tenemos que tomar decisiones con responsabilidad porque poner el riesgo el sistema sería aún peor”.

El titular de Sanidad explicó asimismo que  la regulación diseñada por el SESPA  trata de “garantizar el empleo estructural” y reconoció que a nadie se le escapa que “si hacemos más horas de trabajo, habrá menos necesidades de contrataciones eventuales”.

Sobre la posible merma de esta contratación eventual que se producirá con la entrada en vigor del decreto, Faustino Blanco explicó que, “por desgracia, en una situación como esta, no es posible pensar en cada caso individualmente” sino que debemos pensar en el conjunto de los trabajadores de la sanidad asturiana en su futuro  y en cumplir con rigor el presupuesto del Principado y el plan económico financiero.

“Yo comprendo la dureza de la situación pero la ciudadanía debe saber que estamos dando respuesta a una situación que no ha sido generada ni por la sanidad asturiana ni por el Principado, son situaciones de un país que atraviesa por momentos muy críticos”, aseguró el Consejero.

El Consejero de Sanidad hizo estas declaraciones minutos antes de la visita que realizó a diferentes centros del Área Sanitaria V como el Hospital de Cabueñes, el Centro Integrado de Salud Mental de Montevil, el Centro de Salud Severo Ochoa, y la Gerencia del Área, donde mantuvo una reunión de trabajo con la Gerente Montserrat Bango.

Triage en las urgencias de Cabueñes.

En el Hospital de Cabueñes, Faustino Blanco visitó el servicio de urgencias, donde  recientemente se han ejecutado una serie de reformas destinadas a mejorar la atención, la seguridad y la comodidad de los pacientes que acuden a este servicio.

Esta reforma incluye la adecuación de las instalaciones para hacer posible la implantación de un programa de triage con el que se asignará una prioridad clínica adecuada a cada paciente que demanda cuidados urgentes, identificada mediante colores.

Es un sistema que mejorará la atención que se presta a cada enfermo en particular y que permite además una mejor organización del servicio que redunda en un trabajo más profesional, más seguro y eficaz.

El método de triage establece que, en el momento que una persona accede al servicio de urgencias, sea valorado por un profesional que analiza un número determinado de síntoma y signos en cada paciente con el objetivo de que se atienda primero a quien presenta mayor riesgo. En función de la urgencia de la situación clínica del enfermo, se le asigna un tiempo de espera máximo en el que su problema de salud debe ser atendido por los profesionales.

Este sistema funciona ya en buena parte de los hospitales de la red pública asturiana y ha obtenido excelentes resultados tanto desde el punto de vista de la calidad como de la eficiencia en la atención.

Traslado del HUCA.

El Consejero de Sanidad se refirió asimismo al traslado del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) a las nuevas instalaciones de La Cadellada. Explicó al respecto que el plazo de un año parece un horizonte “razonable” para pensar en la apertura de estas nuevas instalaciones.

Faustino Blanco insistió en que la clave de la operación no es tanto la mudanza o el cambio de lugar de equipos y pacientes como el traslado de un modelo de trabajo como el que se ejecuta actualmente en el HUCA a un “nuevo modelo” que es “altamente tecnológico y que requiere una preparación de equipos y de profesionales que no se puede improvisar porque sería una enorme irresponsabilidad”.

Para poner en marcha este traslado, la Consejería de Sanidad ya ha creado una “oficina técnica para el cambio de alto nivel” que se encargará de liderar este proceso y abordar el plan que pueda hacer efectivo el traslado con totales garantías de éxito.

Reducción de la factura de farmacia.

En relación a la reducción de la factura de farmacia del pasado mes de julio, que ha descendido un 14% de media en número de recetas en el Conjunto del Sistema Nacional de Salud con respecto al mismo mes del año anterior, Faustino Blanco consideró que los primero resultados obtenidos no pueden ser tomados como definitivos.

Faustino Blanco explicó al respecto que ni los indicadores de junio, en los que previsiblemente pudo existir un acopio de fármacos, ni los de julio, en los que es posible que se refleje el resultado de este acopio, pueden resultar significativos para hacer una valoración real de los efectos del copago.

 El titular de sanidad considera que para medir el efecto real es preciso un periodo de tiempo aún mayor y aventuró que en los próximos meses de septiembre y octubre es cuando podremos obtener datos más fiables.