Tras la victoria del Sporting ante el Levante (3-2), Javier Clemente aseguró que no iba a "hacer los cambios pensando en los gustos del público", en referencia a las protestas generadas en la grada en el momento de las sustituciones, y se preguntó: "si es el público el que hace los cambios ¿para qué me pagan a mí?".
El técnico del conjunto gijonés destacó que dos de los goles fueron logrados por "Trejo y Sangoy, que parece que son dos de los que no gustan mucho al público", y defendió la actuación de todos sus jugadores, "que juegan al límite de sus fuerzas".
Además añadió que "estos tres puntos suponen la posibilidad de seguir peleando por evitar el descenso. Quedan seis partidos y hay que ir a por los 18 puntos, ¿qué es difícil?, claro, pero que lo vamos a intentar, seguro".