En la fotografía hay dos jinetes avanzando con calma por la orilla. No van deprisa. No posan. Simplemente están ahí, cruzando una playa abierta, inmensa, con el Cantábrico marcando el fondo como un telón en movimiento constante. La escena no es excepcional en Salinas. Y eso dice mucho. Porque en Salinas lo extraordinario se ha vuelto cotidiano. Y esa es, ...
Leer Más


