EBHISA multada con 60.000 euros por la autocombustión de carbón en El Musel: exigencia de planes preventivos y de actuación

EBHISA multada con 60.000 euros por la autocombustión de carbón en El Musel: exigencia de planes preventivos y de actuación

La Consejería de Transición Ecológica, Industria y Desarrollo Económico ha impuesto una sanción de 60.000 euros a European Bulk Handling Installation (EBHISA), empresa gestora de la terminal de graneles del puerto de Gijón, debido a la grave infracción relacionada con la autocombustión de parvas de carbón a finales de enero y principios de febrero.

Cabe destacar que durante estos incidentes, el protocolo contra la contaminación se encontraba activo.

La sanción se basa en la negligencia de EBHISA al no adoptar las medidas necesarias para prevenir la autocombustión del mineral en las instalaciones portuarias, así como para sofocar los puntos calientes de las pilas de carbón tras detectarse la ignición.

Las cinco inspecciones realizadas por la Dirección General de Calidad Ambiental a EBHISA confirmaron que la empresa no siguió los procedimientos obligatorios establecidos en la instrucción para este tipo de sucesos. Esta omisión, considerada una infracción grave según la Ley 34/2007 de Calidad del Aire y Protección de la Atmósfera, ha derivado en la sanción impuesta.

Más allá de la multa económica, la Consejería ha exigido a EBHISA la presentación de dos planes:

1. Plan de control preventivo de la autocombustión de las parvas:

  • Este documento deberá incluir:
    • Sistemas de control y monitorización.
    • Condiciones de manejo y almacenamiento.
    • Altura, tiempo de almacenamiento y sellado de las parvas.
    • Condiciones especiales según el tipo de carbón.

2. Protocolo de actuación en caso de autocombustión:

  • El protocolo deberá definir:
    • Indicadores para la activación de situaciones de riesgo e incidentes.
    • Medidas a adoptar.
    • Medios personales, materiales y equipos previstos.
    • Alertas a las autoridades.
    • Condiciones especiales en función de la tipología de los carbones.

La Dirección General de Calidad Ambiental será la responsable de revisar y validar ambos planes.

La Consejería confía en que la implementación de estas medidas preventivas minimice la recurrencia de este tipo de incidentes y, en caso de producirse, permita una respuesta rápida y eficaz.

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