El desempleo registrado subió en marzo en 4.511 personas (+6,18%) por la menor actividad económica derivada del coronavirus COVID-19 y la finalización de contratos vinculados al sector servicios y a la construcción. De esta manera, Asturias cuenta actualmente con 77.451 personas inscritas en las oficinas de desempleo.
Hasta marzo, Asturias encadenaba 77 meses de descenso interanual consecutivo del paro. Los datos de marzo –en especial, los correspondientes a sus últimas dos semanas, a partir de la declaración del estado de alarma- han quebrado esta tendencia. No obstante, con los números conocidos hoy, Asturias fue la sexta comunidad en la que menos subió el paro en términos intermensuales (de marzo respecto a febrero) y la quinta si la estimación se hace de modo interanual (marzo de 2020 respecto a marzo de 2019).
Según los números facilitados por el Servicio Público de Empleo del Principado (Sepepa), el aumento del paro corresponde mayoritariamente a personas que han finalizado su contrato o han visto rescindida su relación laboral de manera anticipada.
Los incrementos porcentuales más elevados se registran fundamentalmente entre los hombres (+7,93%), en el grupo de edad entre 25 y 45 años (+9,22%) y en la construcción (+13,06%). La excepción al aumento generalizado del paro es el sector primario, esencial para mantener el abastecimiento de alimentos. La actividad de agricultura, ganadería y pesca es la única que registra un ligero descenso en el número de parados, 30 personas menos, un -2,11%.
El incremento mensual en la industria se produce fundamentalmente en las actividades relacionadas con el metal y reparaciones de maquinaria. En la construcción, el crecimiento del paro se registra fundamentalmente en las actividades de construcción especializada, en los oficios. En los servicios se producen aumentos importantes en el comercio al por mayor (con 337 personas más paradas), actividades relacionadas con la hostelería (1.079 personas más) y las actividades vinculadas con el empleo (589 personas más), además de otros servicios personales (119 personas más).
La incidencia de la crisis sanitaria se observa también en la evolución de la contratación, que descienden hasta los 18.904.
En números absolutos, son 6.437 menos que en (-25,40%). Al mismo tiempo, la afiliación a la Seguridad Social descendió el mes pasado el 0,96%, por debajo del promedio estatal, hasta situarse en 359.525 cotizantes, lo que supone 3.499 personas en alta menos. Pilar Varela, directora del Sepepa, considera que los datos ponen de manifiesto el impacto de la crisis sanitaria en el mercado laboral.
Desde el 14 de marzo, fecha en la que se decretó el estado de alarma, una parte importante de las empresas han cesado temporalmente su actividad. Destaca, asimismo, que el amplio conjunto de medidas económicas y sociales aprobadas por el Gobierno de España y complementadas por el Ejecutivo autonómico van orientadas a la progresiva recuperación de la actividad y del empleo, así como a dar cobertura a las personas que más se están viendo afectadas por la situación excepcional derivada del COVID-19.
El Consejo de Gobierno aprobó la semana pasada un primer paquete de diez medidas que conllevará un desembolso superior a los 32 millones.