Desde la madrugada, en que tras la rueda de prensa de la cumbre del Euro empezaron a producirse las primeras valoraciones, llevo pensando que este país no es serio. Estamos como en el patio del colegio. Le coge la peña manía a uno de los críos y ¡hala! todos los palos pa él.
Apenas ayer, anteayer si me apuran, en vísperas de la cumbre, estaban que se rachaban pernera abajo todos los que temían que se rebajase el valor de la deuda soberana de España en un 20%, principalmente porque el que tiene 100 millones de las antiguas pesetas metidas en deuda pública, por ejemplo, se quedaría con 80. Así, de un plumazo.
Total, que se dedicaron desde periódicos, arradios y teles a darle caña a Zapatero: ¡No cedas! ¡Ni un paso atrás! ¡Tú firme ahí! y por el estilo. Además, los 'expertos' al uso, en su línea habitual de joder al personal de a pié, auguraron un fracaso de la cumbre, la imposiblidad de que se pusiesen de acuerdo, el caos, el acabóse y el apocalipsis (se ve que lo tienen muy seguro...Anda que, como estallase una revolución social verdadera --lo que no queremos nadie, salvo ellos, al parecer-- me iba a reir yo de la cara que les iba a quedar).
Allá que se va el Presidente, y a las tres y media de la madrugada tiene la satisfacción de poder comunicar, a la vez que Sarkozy (lo de Merkel y Nicolás ya es romance político, y eso que empezaron mal...), que la cumbre acabó en éxito: tres de tres. Y que la deuda de España no se rebaja.
Pues allá van los palos. En la madrugada los titulares y comentarios eran demoledores. ¡Golpe a la banca! !Recesión! ¡Zapatero claudicó! y así por el estilo. Pero hete aquí que hacia las 07 horas comienzan a llegar otras noticias. Suben las bolsas asiáticas, sube el IBEX un 3% que no recordaban ni los más viejos del lugar, las bolsas se disparan y OJO: A la Comisión Nacional del Mercado de Valores comienzan a llegar, uno tras otro, los comunicados de los Bancos españoles sobre hechos relevantes: Recapitalizarán sus reservas sin necesidad de dinero público e, incluso, por encima (Santander) del 9 % que exige Europa.
Y claro, llega la sorpresa, el pie cambiado y, cómo no, algun medio de comunicación insistía aún en los telediarios de la tarde en sostenella y no enmendalla.
¿Pero de verdad se creen que un presidente del Gobierno de España, por bien o mal que lo haga, que come regularmente con los capitanes de la banca (que tuvieron abiertos sus teléfonos toda la noche para el Presidente, como es lógico), asesorado por el Secretario de Estado de Economía, el asturiano Campa, uno de los técnicos más respetados por el Tesoro de EEUU y otras instituciones financieras del mundo y una valiosísima inteligencia en la comprensión de la Economía, el presidente, digo, iba a ir a la cumbre sin saber hasta dónde podía ceder?
Mentecatos, eso es lo que me parecen quienes echan la lengua a pacer sólo por darle más palos al alumno gordito, o al de las gafas, o al que le coge manía el resto de la clase. Como está de moda, ¡hala!
Seriedad, señores. El Presidente está teniendo más sentido de Estado que nunca, y además lo hace de consuno con el señor Rajoy. Así es que, déjenmelo en paz de una vez, que ya aburre tanto abuso. Menos derrotismo y más trabajo. ¡Hala!
PD: A doña Angela Merkel algún día se le erigirá un monumento. Y sino, al tiempo.
Háganme el favor de ser felices
