Es innegable que la situación económica, política y social que atraviesa Venezuela desde hace varios años es caótica: carencia de medicinas, escazes de alimentos y servicios básicos e imprescindibles en una sociedad moderna.
En otro orden de cosas, Venezuela y España firmaron en Caracas, en mayo de 1988 el convenio bilateral en materia de seguridad social, vigente desde 1992.
En enero de 2016 sin notificación oficial, el gobierno venezolano suspende indefinidamente el pago de las pensiones y jubilaciones a los beneficiarios de las mismas residentes en el exterior, -- quiero destacar que el convenio en su artículo 5º apartado 1º establece: LAS PENSIONES, NO ESTARÁN SUJETAS A SUSPENSION,-- sin que hasta la fecha, -a pesar de las acciones llevadas a cabo ante las autoridades venezolanas por las asociaciones así como por la Federación de asociaciones en España-, el gobierno venezolano no ha mostrado el más mínimo interés en abordar y proponer una solución satisfactoria a esta problemática.
Como consecuencia de la suspensión del pago de esta prestación recogida en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela como un derecho, las más de 15.000 personas 2 afectadas han visto reducidos drásticamente sus ingresos a CERO, sumiéndolas en una situación de incertidumbre, abandono y desidia por parte del gobierno venezolano y, colocándolas en riesgo de pobreza y exclusión social, al ser despojados arbitrariamente de los ingresos –que la pensión le proveía –tan necesarios para hacer frente a sus necesidades básicas.
HACEMOS un llamado al gobierno venezolano y al IVSS para que se atenga a derecho y exigimos:
Reactivar el pago y traslado de las pensiones y jubilaciones al exterior con carácter inmediato y,
Hacer efectivo el pago de la deuda por concepto de pensiones y jubilaciones adeudas desde enero de 2016 a la fecha, a los pensionistas y jubilados de Venezuela residentes en el exterior.
PorUnaPensiónDigna
Sergio Primiani
Asopeve-Asturias Presidente