La Generalidad de Cataluña no veía motivos sanitarios para la cancelación del evento. El Gobierno de España, tan pendiente en los últimos meses de Cataluña, tampoco veía razones para ello. Fueron las bajas confirmadas de 30 grandes empresas tecnológicas las que obligaron a la organización el determinar la cancelación del Congreso Mundial de Mobiles, previsto en la ciudad de Barcelona para los días 24 al 27 del mes en curso.
La tropa ciudadana no tiene ni idea de lo que pasa con el "bicho" de Wuhan; y mucha menos idea de quién lo creó, quien lo propagó y su finalidad, más allá de lo que nos transmiten quienes quieren informarnos de lo que ellos quieren informar, y nada más.
El teatro mundial de los grandes intereses económicos estrena todos los días una nueva obra en un escenario cada vez menos iluminado para unos espectadores titerizados. Fueron las grandes tecnológicas norte americanas las primeras empresas que dieron el paso anunciando su no asistencia al Congreso Mundial de Mobiles. Después de ellas, la misma decisión -como no podía ser de otra manera- la tomaron las empresas europeas. El efecto dominó promovido desde América tuvo un éxito rotundo.
Los avances chinos en el desarrollo de las nuevas tecnologías desesperan a la banda del facineroso intelectual Donald Trump. Las justificaciones sanitarias pasan a un segundo plano cuando los intereses económicas y comerciales del país de las oportunidades se sienten amenazados.