Aunque resulte difícil creerlo, en el mundo no solo hay política y políticos, también hay historia, cultura y arte y gente noble, honesta y responsable que se ocupa de recrearla, transmitirla y mantenerlo, respectivamente.
La campaña de sensibilización y concienciación que, bajo el lema «300 años de Cultura, Historia y Arte», comienza hoy en el Concejo de Pravia con el objetivo último de allegar fondos para proceder a la restauración de la Colegiata, centro neurálgico del núcleo urbano de la capital del Concejo, es buena prueba de ello.
La importancia histórica y el valor arquitectónico y artístico de la Colegiata está fuera de toda duda, y no solo es el emblema de Pravia, sino que traspasa las fronteras del municipio por cuanto que el conjunto formado por el Palacio, la Colegiata propiamente dicha y las casas de los canónigos conforman una agrupación única en Asturias.
La feliz idea de restaurar una obra de esta importancia tiene, como todas las grandes actuaciones, una paternidad claramente identificable. Hace algo más de un año, el cura de Pravia le pide al arquitecto suizo, pero residente en Pravia, Werner Durrer, que lo acompañe en una visita a las dependencias del primer piso y del bajo cubierta de la Colegiata. En el transcurso de esta suerte de inspección, quedó patente la necesidad urgente de restauración de la cubierta y del campanario dado el negativo impacto de una obra no muy afortunada llevada a cabo en el año 1993 y de los 25 años de falta de mantenimiento.
A partir de esta constatación, Werner redacta un proyecto por encargo de la parroquia, que plantea una actuación con un coste aproximado de 290.000 euros para cuya financiación es preciso allegar recursos que habrán de proceder de las administraciones públicas y de aportaciones particulares.
Precisamente a esa finalidad pretende subvenir la campaña que se inicia hoy sábado.
Es urgente corregir las humedades que afectan, sobre todo, a la zona del órgano protegido y que traen causa en la cubierta defectuosa y en la falta de impermeabilización de los muros de mampostería. La misma urgencia reviste la sustitución de la estructura de madera.
La historia de la Colegiara es muy interesante. Su promotor fue Ignacio Arango Queipo, que hizo carrera eclesiástica en Perú, bajo el auspicio de su tío Juan Queipo de Llano, arzobispo de las Charcas, que lo nombró heredero. Ignacio, en el año 1712, comienza la construcción del conjunto histórico en el terreno llamado «la huerta del campo», situado extramuros de la villa de Pravia.
Destacan del diseño tanto la belleza de las proporciones como la sobriedad de la decoración interior con claras referencias al «Estilo Herreriano».
El arte que se encuentra en el interior compite en importancia con la arquitectura. El retablo mayor, los retablos laterales y las tallas de madera fueron encargados a grandes artistas de la época. Además, la Colegiata alberga unos de lo órganos más antiguos de Asturias que, construido en 1780, fue declarado Bien de Interés Cultural en el año 2017.
El acto programado para hoy contará con la presencia de María del Valle Iturrate, Concejala de Cultura del Ayuntamiento de Pravia, de Yakoy Kavamura, autora de varios artículos sobre la Colegiata y del Cronista de Pravia, Pepe Monteserín.
Actuarán la Coral Polifónica Santiago López y los músicos Cristina, María y Mateo Luces. Al final, la Profesora de Musicología de la Universidad de Oviedo María Sanhuesa dará una breve explicación sobre el órgano e intervendrá el organista Rubén Díez.
Lo dijo el clásico: «No hay mayor expresión de respeto hacia el transcurso del tiempo que restaurar y conservar una obra de arte».