Les doy la bienvenida a este acto institucional en el que la Junta General del Principado, en representación de todos los Asturianos, quiere reconocer la labor y el sacrificio de los “Liquidadores de Fukushima”.
Además, quiero agradecerles muy efusivamente que nos acompañen. La jornada que el Parlamento alberga hoy contiene un profundo significado de conciencia ciudadana.
Seré muy breve. No quiero, ni puedo ni debo, empañar un ápice con mi intervención el merecidísimo protagonismo de nuestros honorables invitados.
Nuestro imaginario esta acostumbrado a héroes de película que saltan entre el fuego o libran encarnizadas peleas contra malhechores.
Hoy nos encontramos aquí con héroes de carne y hueso, que lucharon contra un enemigo invisible pero mortal ofreciendo su vida, con entereza y pundonor, para salvar la de los demás.
Tenemos aquí un ejemplo, una historia tan épica como aquellas que leíamos de niños en los libros de caballería, un hecho heroico que debería permanecer en nuestra retina, un acontecimiento digno de contar a nuestros hijos como modelo de sacrificio, de entrega y de pundonor.
Unas personas anónimas, sin afán de más reconocimiento que llevar a cabo su trabajo ni mayor fin que la ayuda desinteresada. Arriesgaron su vida por salvar la de sus compatriotas.
Por todos estos atributos, por ser ejemplo ciudadano, la Junta General del Principado ha adoptado, de manera unánime, la siguiente declaración:
«La Junta General del Principado de Asturias, en representación del pueblo asturiano, expresando su solidaridad con el sufrimiento de la ciudadanía japonesa en las trágicas circunstancias del devastador tsunami que sufrió en marzo de dos mil once, considera ejemplar el comportamiento de los Héroes de Fukushima, que, justamente galardonados por ello con el Premio Príncipe de Asturias de la Concordia, han dado prueba de ilimitado valor e incomparable altruismo en el cumplimiento del deber y mostrado al mundo entero lo mejor de la condición humana.»
Deseo que recojan con cariño estas palabras que van envueltas en un sentimiento de profunda gratitud.
Domo Arigato.
*Presidente de la Junta General del Principado
