Adrián Barbón deberá de esperar al lunes para ser nuevo presidente del Principado. Hoy le faltó un voto para alcanzar la mayoría absoluta de los 23 al abstenerse como estaba previsto los diputados de Podemos que se quejan de la escasa información del PSOE sobre sus planes para Asturias, una comunidad autónoma que según el Colegio de Economistas, cuyo decano es Miguel de la Fuente, tiene un futuro cada vez más obscuro, algo que a la mayoría de los ciudadanos nos resulta obvio desde hace tiempo.
El ex alcalde de Laviana tiene olfato y se ha presentado en la Junta General del Principado elegante e irónico, dominando las tablas y con mucha mas energía que en la que en los últimos tiempos mostraba su antecesor Javier Fernández. Adrián Barbón lucía traje gris, corbata roja a juego con las gafas e incluso, creo, que con el color de bolígrafo. Improvisó, lanzó puyas a la oposición y dejó entrever en definitiva que sobre todo confiaba en Pedro Sánchez y el gobierno central, y no en Podemos, para resolver los problemas de nuestra tierra con la ayuda de subidas de impuestos, eso que tanto le gusta al partido en el poder y en especial a la que ahora es su portavoz en el parlamento regional, la ex consejera Dolores Carcedo que debería no acelerarse tanto a la hora de hablar. Da la impresión de que pierde el tren, aunque no será del FEVE, cada vez más inoperante, camino de convertirse en unas cercanías cada vez más lejanas para el sufrido usuario asturiano.
Supongo que Adrián Barbón hará una demostración el día de su toma de posesión de poderío socialista invitando al mismísimo Pedro Sánchez a presidir el acto. Ente tanto para Angeles Vallina, cabeza del grupo de Izquierda Unida, cada vez más disminuido y sin influencia, ¡Cuanto te echamos de menos Gaspar Llamazares!, es urgente que la izquierda asturiana vaya de la mano en apoyo de este PSOE moderado y cada vez menos rojo. El grupo de Podemos no se deja mangonear, Daniel Ripa es mucho Daniel, el travieso, y la tensión existente en Madrid entre los jefes Pablo Iglesias y Pedro Sánchez no contribuye ni mucho menos a que en Asturias PSOE y Podemos se besen. Supongo que en cuanto Barbón tome posesión y anuncie nuevo gobierno sus Señorías se dedicarán a subirse los sueldos, incluida esa vergonzante medida de aplicar paro a los diputados cuando estos cesen en su puesto. Me santiguo, dicho sea con todo respeto, ante semejante desfachatez.
Ayer asistí a la fiesta de uno de los comercios tradicionales y de prestigio de Oviedo, Opticalia Quesada que cumple cien años. Unas quinientas personas de medio pelo nos dimos cita en el Castillo de La Zoreda con un espectáculo abierto y cerrado por el ilusionista ovetense José Armas, todo un Houdini local que ahora que Roberto Sánchez Ramos ya no es concejal de Cultura espera debutar pronto en el Teatro Campoamor.
En primera fila el alcalde Alfredo Canteli, arropado por varios concejales del PP; por el Principado el director de Comercio y Turismo Julio Zapico, en el que fue sin duda último acto como tal, y a quien la presentadora Arancha Nieto, tan guapa como siempre, en un gesto de generosidad le elevó a consejero. Discursos y elogios a la familia Quesada, ejemplo para el comercio local y asturiano.
Por supuesto no faltaron ni el presidente de FADE, Belarmino Feito, ni el de la Cámara de Comercio de Oviedo Carlos Paniceres, ni el de OTEA José Luis Alvarez Almeida quien en defensa de la hostelería no pierde xarao. Un cada vez más apagado Francisco Alvarez-Cascos saludaba con cierta disciplencia, esto es, mirando para otro lado al darte la mano cada vez que se le acercaba alguien conocido, vigilado de lejos por su antiguo compañero de partido Isidro Fernández Rozada.
El que fue concejal en la anterior etapa Juan Pérez Zaldivar, muy contento por haber vuelto a ser elegido presidente del Rotary Club de Oviedo, me confiesa que no volverá a la política, ni siquiera municipal, y es que no todos piensan en la maserona pública. En definitiva la fiesta del centenario de Opticalia Quesada fue un éxito, que no todos los años se cumplen los cien a través de tres generaciones; solo queda ahora esperar que con la nueva corporación municipal y el nuevo gobierno autonómico la pequeña y mediana empresa se revitalice en Asturias. Como bien me dijo Carmen de la Uz, vicepresidenta de los Comerciantes de Oviedo, hay que mirar cara al futuro y no bajar la guardia. Como debe ser.