En relación con la información aparecida hoy en varios medios de comunicación tras la presentación de los resultados de la IV Encuesta de Salud para Asturias sobre las recomendaciones de Salud Pública a las instituciones públicas “a reflexionar sobre la organización de festivales de cerveza y sidra asociados al alcohol”, desde la patronal de Hosteleria de Asturias, Otea y la DOP Sidra de Asturias nos gustaría hacer las siguientes consideraciones:  

Tanto desde Otea como desde la DOP Sidra de Asturias no discutimos en absoluto las conclusiones técnicas del estudio, pero nos sorprende y nos molesta que se haya incluido en la presentación de sus conclusiones el comentario sobre los festivales de Cerveza o Sidra. Creemos que ha sido una declaración un tanto desafortunada pues tanto la sidra como la cerveza son, precisamente, las bebidas que tienen la menor graduación alcohólica del mercado.  

Entendemos que hay actuaciones mucho más necesarias y urgentes para reducir el alcoholismo entre la sociedad asturiana, como podría ser la lucha contra el botellón donde, efectivamente, el consumo de alcohol sí es preocupante.  

Poner el ojo en campañas o festivales de promoción de la sidra criminaliza indebidamente su consumo moderado y responsable, apuntando directamente a unos consumidores que precisamente demuestran una vez tras otra ser los más conscientes y respetuosos para consigo mismos y también para con los demás.  

Existe además, un decálogo de reciente creación, donde la Asociación de Sidra Asturiana plasma de forma clara cuales son las normas que defiende el sector para la promoción de la sidra en Asturias, razón de más para reiterar la inoportunidad de que se traslade la idea de que es la sidra una de las causas de la propagación del alcoholismo entre los consumidores del Principado de Asturias.  

Pero es que, en el caso de la sidra natural, tenemos que considerar que estamos hablando de una bebida cuyo consumo moderado, puede ser saludable y con muchas propiedades beneficiosas para la salud, tal y como se recoge en las conclusiones del trabajo de investigación realizado en 2015 por el Departamento de Biología Funcional de la Universidad de Oviedo en colaboración con el CR DOP Sidra de Asturias y en el que explica que: Eleva el tono vital, el tono afectivo y mejora los procesos cognitivos. Además, el consumo moderado ejerce una función protectora del aparato vascular frente algunas patologías.  

Por último, cabe recordar que, en la Ley de atención integral en materia de drogas y bebidas alcohólicas, la sidra quedó excluida de la misma debido a su baja graduación alcohólica.  

Desde Otea y desde la CR DOP Sidra de Asturias recomendamos siempre el consumo responsable y lo hacemos de formas explicita en todas las campañas de promoción y estamos siempre dispuestos a colaborar con la administración en las campañas de prevención del consumo excesivo de alcohol.  

En el siguiente enlace se puede acceder al resultado del estudio universitario aludido: http://www.sidradeasturias.es/detalle.php?var=925