Uno de nuestros más voluntariosos artistas y mejor persona, el candasín Pipo Prendes acaba de componer el himno de Ribera de Arriba, concejo vecino de Oviedo que cuenta con el alcalde más veterano de Asturias, Ramón García Sainz y que desde el inicio de la democracia ha ganado todas las elecciones municipales con mayoría absoluta. Socialista de toda la vida, jubilado como trabajador de la UGT, Ramón García ha decidido no volver a presentarse, desencantado como está con los que ahora gobiernan su partido, los sanchistas, a los que no puede ver ni en pintura. Su último acierto en mi opinión ha sido la adquisición del palacio del prócer Carlos Prieto en Bueño, localidad que en su día tendrá que colocarle una estatua.
Aunque falta algo más de un año para las próximas elecciones autonómicas y municipales quien si parece que intentará repetir como alcalde de Oviedo es Wenceslao López. Con solo cinco concejales de 27 viene realizando con sabiduría y mano izquierda un difícil equilibrio al frente del tripartito que gobierna el ayuntamiento de la capital. En un principio no creo que los tres, PSOE, Podemos e IU, se coaliguen, en todo caso lo harían a posteriori, pero sí que también Podemos volverá a apostar por la abogada Ana Taboada e Izquierda Unida lo hará de nuevo por el veterano Roberto Sánchez Ramos "Rivi" que tan bien sabe manejar los hilos de la izquierda local.
Es la derecha la que aún no tiene la margarita deshojada. Aunque Agustín Iglesias Caunedo insiste me da en la nariz que no será el candidato, no pierdan de vista al abogado Ivan de Santiago, y ni Foro ni Ciudadanos han decidido a quien colocarán al frente de sus listas. Oviedo, la verdad, necesita un impulso desde el ayuntamiento. La construcción de nuevas viviendas sigue bajo mínimos. SEDES, eso sí, ha terminado las viviendas en calle de General Elorza, donde estuvo la famosa "Madreña", y enfrente la constructora de Del Fueyo inicia ahora otra construcción en el solar que ocupó en su día la "gota de leche", edificio que, por tanto, deberá ser derribado. Apenas 300 nuevas viviendas se construyeron en la capital el pasado año. Lo de Jovellanos XXI continúa parado y los agujeros ya clásicos de nuestra ciudad, el spa en el Naranco, la fábrica de la Vega, el antiguo hospital, la plaza de toros, la zona derecha de la Tenderina, cuya propiedad de los terrenos se vino abajo por muy Casildo Blas Herrero que estuviera entre los accionistas, la ronda norte, etc. esperan soluciones.
Oviedo debe crecer en La Manjoya, Montecerrao, San Claudio y La Florida. La zona de La Corredoria, la de más expansión en los últimos años, se me antoja saturada. Oviedo tiene también edificios emblemáticos cuyo futuro pronto estará resuelto, caso por ejemplo del conocido como "pozo de la moqueta" de HUNOSA en la avenida de Galicia, cada vez más vacío y con el proyecto, me consta, de que la SEPI traslade las oficinas centrales y otros servicios al Pozo Sotón del que la actual presidenta Teresa Mallada está enamorada. Otro edificio que pronto tendrá nuevos propietarios es el de la antigua Caja de Ahorros en la plaza de La Escandalera. A Liberbank, actual propietario, cada vez le interesa menos Asturias y de su venta para pisos de lujo y oficinas podría obtener importantes plusvalías. Por cierto, me sorprende que en la torre de la antigua Caja de Ahorros al inicio de la calle Aureliano San Román luzca en su alto un enorme letrero de Caja Astur con el logo incluido, el asturcón que como la caja asturiana pasó a mejor vida sin que los asturianos nos enterásemos. Y además está muy bien iluminado durante la noche. Mejor para EDP.
