Acaba 2017. Y con este, ya van seis años de gobierno de Mariano Rajoy. Seis años de fracaso. Seis años que dejan un país más desigual, más precario y con el corazón más roto. Seis años con cuatro grandes fracasos: la fractura social, la fractura territorial, la corrupción y el incumplimiento de sus propias promesas electorales. Rajoy es fracaso.

La fractura social

La acción del gobierno de Rajoy, o su inacción, esta detrás del incremento de las desigualdades, la precariedad y la pobreza que hay en nuestro país. El gobierno se muestra  incapaz de conseguir que el crecimiento económico llegue a la mayoría de la sociedad.

La economía Española salió de la recesión en 2014, pero es la primera vez en nuestra historia reciente que el crecimiento no está sirviendo para reducir la pobreza y la desigualdad. Tras estos años de expansión económica la diferencia entre los que más ingresos reciben y los que menos se mantiene, ha aumentado el número de personas en riesgo de pobreza y también ha subido la desigualdad en nuestra sociedad que recoge el índice gini. Nuestra economía social de mercado está perdiendo el carácter social, para ser únicamente una economía de mercado.  Una economía que crece, pero cuyo crecimiento no llega a la mayoría. Un Gobierno incapaz de aplicar los mecanismos de redistribución que sustentan el contrato social que ha cimentado el desarrollo del nuestro país desde la transición.

La fractura territorial

El Gobierno no ha sido capaz de abordar el desafío secesionista de Catalunya gestado durante años hasta que le ha estallado en forma de la mayor crisis de Estado de nuestra democracia.

La crisis en Catalunya se lleva gestando durante varios años y Rajoy no ha sido capaz de anticipar lo que venía encima. El PP actuó en primer lugar como agitador de la desafección de Catalunya con España cuando estaba en la oposición y después fue incapaz, estando en el Gobierno, de contener el auge del independentismo en Catalunya. Los ciudadanos han valorado la gestión del PP colocando a esta formación como la menos votada y con los peores resultados de su historia. El PP hoy es una partido absolutamente marginal en Catalunya.

Rajoy está rodeado por la corrupción

El PP tiene un problema de corrupción sistémica que afecta a toda su estructura territorial, empezando por sus máximos dirigentes. El PP es el primer y único partido en este país procesado por delitos en el Código Penal. Delitos muy graves para un Partido Político, como es no el no colaborar con la Justicia.

El tema de la corrupción afecta al dinero público, el dinero que se llevan los corruptos no va a la Seguridad Social, al paro, a las pensiones y afecta a la calidad de nuestra democracia y a la confianza de la ciudadanía en las instituciones.

El PP no tiene voluntad de colaborar con la justicia y luchar contra la corrupción. Les recuerdo que ha llegado este gobierno. Tenemos al primer presidente de Gobierno en activo que declara en la Audiencia Nacional y que todos los máximos dirigentes del PP han testificado ante el juez por la financiación de su Partido.

En este año además, el Tribunal Constitucional ha anulado  la amnistía fiscal. En su sentencia recordaba al Gobierno que ha abdicado de los deberes del Estado en un tema tan importante como el deber de pagar impuestos, y que está legitimando a los defraudadores fiscales.

No cumplen ni su palabra: el pacto de las derechas

Hace poco más de un año Rajoy y Rivera firmaron un pacto de Gobierno que dejaron en el cajón. Porque no han cumplido casi nada. El 85,8% del “pacto de las derechas” firmado entre el Partido Popular y Ciudadanos no se ha cumplido

El incumplimiento del pacto tiene nombres y apellidos. Su incumplimiento afecta a los autónomos a los que le prometieron la luna, a los y las pensionistas, a los menores en riesgo de pobreza, a las personas desempleadas, a la lucha contra la corrupción… Rajoy y Rivera prefieren que nos olvidemos que prometieron regeneración y no han hecho nada.

Entre los principales incumplimientos:

Ni transparencia, ni regeneración ni lucha contra la corrupción.

Prometieron un plan contra la pobreza infantil. No han hecho nada.

Prometieron garantizar la cobertura universal del Sistema Nacional de Salud y recuperar los recursos recortados en Dependencia. Nada de ello han cumplido

Prometieron reformar el Impuesto de Sociedades en tres meses, mayor control a las SICAVs, nuevas medidas para luchar contra el fraude fiscal o recuperar parte del dinero de la amnistía fiscal. Nada de ello han cumplido.

Prometieron que los autónomos cuyos ingresos reales no superen el umbral del Salario Mínimo Interprofesional no tengan la obligación de cotizar. No lo han cumplido

Rajoy es fracaso. Y ante sus fracasos, darle la vuelta a la situación es el reto de la izquierda para el próximo año.