Una sociedad fracturada

Escribo este artículo a los pocos minutos de que se hallan cerrado las urnas en Cataluña. A falta de datos oficiales todo indica que Ciudadanos es la opción más votada pero que el bloque independentista logrará la mayoría absoluta.

A destacar la alta participación y la normalidad habida. Ahora queda por conocer que gobierno se formará. En todo caso a las 17 horas y 28 minutos entró el invierno y me temo que, políticamente hablando, va a ser un invierno largo y complicado no solo para Cataluña si no también para España en general. Es de esperar que el gobierno que se forme acate las leyes del Estado. A destacar también el hundimiento del Partido Popular que paga así, y probablemente de manera injusta, la aplicación del artículo 155 por el gobierno de Mariano Rajoy. En todo caso estoy convencido que en el año 2018 habrá elecciones generales en nuestro país en las que el joven partido de Albert Rovira puede alzarse con el santo y la limosna siendo por tanto el relevo del centro derecha ya muy gastado que representa hoy el Partido Popular.

El problema catalán va para largo y veremos a ver por donde desemboca. Su economía seguirá resintiéndose y las empresas yéndose porque la inseguridad va a continuar. Decía mi abuelo, sabio como todos los abuelos, que el dinero tiene patas y huye de aquellos lugares en que no hay tranquilidad social, política o financiera. Recomponer la relación entre Cataluña y España va a ser una tarea muy ardua y es que no hace mucho el diputado asturiano de Ciudadanos Nicanor García, que profesionalmente fue inspector de Enseñanza, me decía que el espíritu secesionista de Cataluña comenzó a raíz de haberles transferido las competencias de la enseñanza así como de medios públicos de comunicación como la radio y televisión autonómicas. Este mediodía coincidí con el ex consejero de Cultura socialista en el Principado Manuel Fernández de la Cera, también profesor, y coincide. Generaciones de niños y jóvenes han sido adoctrinadas con mentiras y odios hacia España y de ahí están viniendo estos lodos.

Es una pena que esta situación, ya veremos que consecuencias finales traerá, sea un freno para un país como el nuestro con una gran capacidad productiva y de integración en la Unión Europea. Está claro que no se puede demorar más la reforma de la Constitución a ver si mediante algún encaje esta fractura que vive nuestra sociedad entre una de nuestras principales autonomías y el resto del país se restaña. Por supuesto, lo que sucede no es bueno para el Principado convertido por nuestra indolencia e incapacidad en autonomía de tercera división. Me temo que no tendremos presupuesto para el 2018 dada la tirantez existente entre PSOE y Podemos si bien la abstención de los de Daniel Ripa, "Daniel, el travieso", recientemente reelegido secretario regional de los morados, permitiría a Javier Fernández sacar su proyecto de presupuestos adelante tras haber firmado acuerdo con Izquierda Unida lo que le garantiza 19 votos en la Junta General del Principado de los 23 que constituyen la mayoría absoluta y necesaria por tanto para su aprobación. Como casi siempre la derecha a verlas venir.



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