Mi espía preferida, la XP XIII, me pasa la solicitud de algún equipo, quizás el Sporting, para fichar no a un delantero sino a un director de comunicación, que siempre está bien que se acuerden las empresas de los profesionales de la comunicación. En este caso se pide una formación universitaria superior (preferiblemente en periodismo, comunicación, marketing o relaciones públicas); experiencia mínima de 8 o 10 años en el área de comunicación, preferiblemente en radio deportiva; se requiere conocimiento y experiencia estratégica en comunicación y márketing on line con un buen manejo de las redes sociales; destacada cultura deportiva; gestión de equipos bajo su responsabilidad; nivel alto de inglés; disponibilidad para viajar con frecuencia a nivel nacional; se valorará positivamente buena presencia y destacadas habilidades sociales con amplios de contactos. Y lo más importante, los profesionales interesados pueden enviar su curriculum actualizado a la dirección cgarciamori@recruitmentsolutions.es con la referencia "DIRCOM". Suerte.
Esperemos que el sueldo no sea mileurista y digo lo del Sporting porque en estos momento que yo sepa no tiene director de comunicación después de la marcha de Fernando Gallardo. Precisamente recuerdo que hace unos días los asistentes a la tradicional cena en La Zoreda que el Club Rotario de Oviedo, que tan acertadamente preside Eduardo Quesada, quedaron con la boca abierta por la actuación a los postres de la misma del galardonado, el colega <bb<josé maría="" garcía<="" b="">, quien en esta ocasión recibió la distinción Paul Harris que cada año entrega este club cultural y solidario. El bueno del "butanito", como se le conoce en los círculos profesionales, tras el café, a las doce de la noche cogió el micrófono y lanzó una perorata de una hora y diez minutos en la que no dejo títere con cabeza, con especial atención a Mariano Rajoy, a quien llegó incluso a imitar en sus andares, Felipe González y José Maria Aznar por citar. Al término del discurso, con los asistentes al borde de un ataque de nervios, uno de los presentes, conocido vecino de Oviedo, se levantó para echarle en cara al periodista que no habían acudido al acto para escuchar un mitin. García, sin cortarse lo más mínimo, le respondió que si no había libertad y no le dejaban hablar (una hora y diez minutos a los postres) no asistiría más a este tipo de actos. Y eso que para terminar dijo que sobre el coletas hablaría otro día. Menos mal que la organización para calmar al comunicador le regaló una buena caja de puros.
El secretario de Estado de Infraestructuras ha estado en Gijón en una reunión del consejo de Administración de Gijón al Norte que no es lo mismo que más al norte está Gijón. Parece que por fin el ministerio que preside Iñigo de la Serna se echa a las espaldas las más urgentes infraestructuras del Principado. No solo el metro tren, la nueva estación de ferrocarril en Gijón sino también lo que queda por soterrar de la línea del FEVE a su paso por Langreo. ¿Será verdad que por fin el Partido Popular se dispone a intentar conquistar el gobierno de Asturias en las próximas elecciones?. El caso es que échame alpiste y llámame gorrión, que a nuestra autonomía le urge una solución a esos endémicos problemas mientras la izquierda oficial se diluye en disputas de salón, algo que maneja muy bien el diputado Gaspar Llamazares.
Veo el informativo de la TPA de mediodía y no doy crédito a una amplia información sobre una empresa danesa fabricante de productos para la tercera edad, principalmente tampones para la continencia urinaria, que ha decidido comenzar a vender en España escogiendo Asturias para su debut como región más afectada por el envejecimiento de su población. Supongo que para vender tales productos puede hacerlo aquí o en Huelva. Otra cuestión sería si decidiera crear una factoría en nuestro suelo pero gastar minutos de la televisión pública asturiana en anunciar tal iniciativa comercial me parece ridícula, aldeana, salvo que hayas otros intereses que se me escapan.
