El jueves cesó la extracción de carbón en otro de los, ya pocos, pozos mineros que la empresa pública Hunosa mantiene en funcionamiento en Asturias. El pozo "Maria Luisa" -que alcanzó gloria al figurar en la letra de una canción basada en un accidente minero- tampoco aguantó las decisiones políticas, dictadas desde ese otro pozo sin fondo que constituye la llamada Unión Europea, y pasa a formar parte de la lista negra de los muchos cierres fabriles que sumen a la cuenca del Nalón y sus alrededores en una zona sin futuro industrial.
Hunosa que llegó a ocupar en Asturias, allá por los años 90 del siglo pasado a más de 20.000 trabajadores, cuenta ahora con una plantilla de 1.200 personas.
Hay otra tonada del cancionero asturiano que hacía alusión a cuatro explotaciones mineras, en su momento referentes de la actividad principal en las zonas de localización. Decía una de sus estrofas:
De Laviana a Carbayín
viva la xente minera
Pumarabule y Candín,
Saús y la Mosquitera.
Otros cuatro pozos cerrados. Otros cuatro pueblos quebrados.