Supongo que mis inteligentes lectores se habrán dado cuenta, sin duda, que mi comentario de ayer, 28 de diciembre, día de los Inocentes, era tal, una inocentada, costumbre que se está perdiendo en la prensa española pero que cuando yo comenzaba como plumilla, allá por la década de los 60, estaba muy de moda y nunca he querido perder.
Escrito lo cual vamos a la actualidad, interesante en estos últimos días del 2016 con un pleno previsto para mañana, viernes, en que la Junta General del Principado aprobará los presupuestos para el año 2017 con la abstención del Partido Popular y un apoyo incondicional de Ciudadanos, mientras Foro que se resiste a perder protagonismo, Izquierda Unida y Podemos votarán en contra.
Estamos en tiempo de presupuestos y de los más de 4.200 millones de euros que suponen los de Asturias casi el 70 por ciento irán destinados a asistencia social. Para el PSOE y en concreto para el gobierno del Principado la aprobación supone un buen respiro, claro que si desglosamos el proyecto apenas hay dinero para inversiones. Creo que Asturias necesita un adelgazamiento de su administración pero suprimir organismos y rebajar plantillas de funcionarios Javier Fernández no es muy partidario o, en todo caso, no se atreve a meter tijera. Con la nave autonómica en la práctica en manos de la consejera de Hacienda Dolores Carcedo y con los diputados Fernando Lastra y Jesús Gutiérrez vigilantes de que no entre en aguas procelosas, el jefe del Ejecutivo asturiano podrá así dedicarse a fondo de aquí a junio a conducir al PSOE nacional a través de la gestora para preparar el congreso extraordinario y las correspondientes primarias. Mientras la senadora María Luisa Carcedo permanece callada la joven diputada riosellana Adriana Lastra no para de manifestarse en apoyo de Pedro Sánchez, convencida cono está de que el ex secretario general volverá a presentarse por mucho que Patxi López suene además de Susana Díaz.
En el terreno municipal un ayuntamiento importante, el de Oviedo, es el único que aún no ha podido aprobar el presupuesto. Ya les ocurrió con el actual que no entró en vigor, creo, hasta abril. Ahora el tripartito, que se queja constantemente de la falta de personal, quiere sacarlos adelante en febrero, que políticamente hay acuerdo entre PSOE, Somos e IU. Oviedo tiene muchas asignaturas pendientes y cientos, sino miles, de losetas que fijar en nuestras calles. Nunca mejor dicho, el palacio de Calatrava, huérfano de congresos que no aparecen, el spa a medio hacer en el Naranco, la deuda con COMANSA por Villa Magdalena y otros asuntos varios hacen que las ruedas chirríen en el gobierno municipal. Salvan que aparte de ser el tripartito mayoría la oposición, aquí Ciudadanos está firme con el PP pero, claro, les falta un concejal para alzarse con el poder municipal, tiene una actuación más bien endeble puesto que ni Pacho ni Zaragoza, siempre bien intencionados, tienen un tirón local importante y el grupo popular cada vez está más en manos de la presidenta regional Mercedes Fernández.
La presidenta del PP asturiano tiene, cara al congreso regional en primavera, las aguas calmadas salvo en Avilés donde la guerra entre los concejales conservadores ha logrado que la socialista Mariví Monteserín, un poco soberbia la chica, se encuentre con los presupuestos aprobados. El portavoz del PP en el ayuntamiento es Carlos Rodríguez de la Torre y está enfrentado con parte de la junta local de su partido y en concreto con la presidenta Carmen Maniega. Esta y los suyos estaban por la abstención ya que consideran que es bueno que Avilés tenga presupuestos mientras que el que fuera secretario de la Cámara de Comercio estaba por el voto en contra. Mercedes Fernández que políticamente ve la yerba crecer no quiere entrar en la guerra avilesina. Ya dejó bastantes plumas en Gijón pero está claro que cuenta con Rodríguez de la Torre para el futuro en cargos más ambiciosos y no con Carmen Maniega.
Gijón también tendrá presupuestos con una alcaldesa, la de Foro, Carmen Moriyón, cada vez más asentada y perfecta en su diálogo con la oposición, de tal manera que incluso la rama de Podemos y también IU la apoyan. Para Foro llegar a las próximas elecciones autonómicas y municipales, dentro de dos años y medio, teniendo la alcaldía del concejo más poblado de Asturias me parece fundamental aunque Principado y gobierno central le nieguen el pan y la sal, o sea, las nuevas vías ferroviarias y el metro tren, entre otros temas.
Sí creo que en el tiempo que le quede libre de la gestora a Javier Fernández, y en todo caso al consejero de Presidencia Guillermo Martínez, el 2017 debe ser un año para consolidar bajo la batuta del Principado la consolidación de esa área central, vieja aspiración de los asturianos ya de los tiempos franquistas. Dicho sin acritud, en algunos casos los ayuntamientos asturianos se convierten en reinos de Taifas y en los tiempos modernos y críticos que vivimos ello no favorece nada. Tenemos que prepararnos ante las modificaciones institucionales que sin duda va a sufrir nuestro país sin perder de vista lo pequeña y poco competitiva que de momento es nuestra autonomía.
Feliz año y perdón por la inocentada.
