La telegénica Ana Luz Suárez de la Productora de Programas del Principado me llama para entrevistarme para un programa que la televisión autonómica esta preparando con motivo de la celebración el próximo mes de abril del 50 aniversario de Hulleras del Norte S.A. (HUNOSA) fundada el 17 de abril de 1967 y que llegó a ser la más importante empresa minera del país con una plantilla que alcanzó su punto máximo en 1972, año en que estalló la primera gran crisis del petróleo, con 32.500 trabajadores directos y otros tatos indirectos.
En las instalaciones televisivas de San Esteban de la Cruces, que comparten con el centro regional de TVE, encuentro a uno de mis antiguos jefes en la citada compañía, el ingeniero Luis Tejuca a quien también le habían convocado para lo mismo. Será, me explican, un programa histórico en el que también saldrán, entre otros, el que fuera directivo de la compañía Miguel Alvarez Areces, el ex rector Juan Vázquez, el profesor Fermín Rodríguez y supongo que la actual responsable de la empresa la ingeniera allerana María Teresa Mallada a la espera de ser confirmada o no en el cargo por la nueva presidenta de la SEPI, la inspectora de Hacienda Pilar Platero, persona de máxima confianza del ministro Cristóbal Montoro que la tenía como subsecretaria en su ministerio.
Cada día que pasa la minería del carbón es más historia en nuestro país y en concreto en nuestra región en donde durante años, más de cien, fue uno de los motores de la economía asturiana formando junto con la producción de acero un mercado de monocultivo que ahora cada vez es más raquítico. Acaba de publicarse el dato de que en los seis primeros meses del año Asturias ha visto disminuir su población en casi 3.500 personas situando el total en 1.030.000 y bajando. Y es que la falta de puestos de trabajo antes cubiertos por ese mercado monocolor está provocando la huida en busca de oportunidades de futuro a muchos asturianos, principalmente jóvenes y universitarios.
Coincidencia, el mismo día que me graban en la TPA nos reunimos de noche como hacemos todos los años por estas fiestas un grupo de antiguos directivos de HUNOSA, por supuesto ya todos prejubilados pero que para mi continúan siendo un pozo de anécdotas y recuerdos. Estuvieron en la reunión, entre otros, German González, Manolo Basteiro, Audilio González que fue director general y ahora anda por Gales salvando explotaciones también de carbón, los hermanos Guillermo y Jesús Martínez, el abogado Serafín, Andrés Suárez, Estéban, Raúl Quintana y alguno más que seguramente me como en esta apresurada crónica.
A partir del próximo uno de enero HUNOSA solo tendrá tres pozos en funcionamiento. Carrio, el único en la cuenca del Nalón, y Nicolasa y Santiago en la del Caudal. De la extracción de carbón a cielo abierto nadie se acuerda y la política del actual equipo de dirección es mantener en lo que puedan una buena imagen de la compañía, ya solo con 1.500 trabajadores, para que no terminen de comerse la moral en la cuencas intentando además una diversificación que no termina de cuajar y que se viene aplicando desde por lo menos la década de los 90.
Lo único cierto, lamentablemente, es que la Unión Europea ha marcado a la minería española el año 2018 para cerrar toda aquella explotación que necesite subvenciones, o sea, que no sea rentable, caso de HUNOSA y de la mayoría de las minas, para subsistir. Los sindicatos que han perdido tanta fuerza como Sansón tras cortarle el pelo espatuxan en Madrid ante el gobierno pidiendo que las térmicas consuman carbón nacional pero el equipo de Mariano Rajoy no se da por enterado, como si solo oyera llover. Hace unos días el nuevo ministro de Energía Alvaro Nadal habló de todo menos del carbón del que se olvidó por completo supongo que adrede.
Y en medio de un panorama tan desolador, donde las emisiones de CO2 del combustible procedente de la hulla no contribuyen tampoco a su atractivo, surge la noticia sorpresiva: Un empresario privado está a punto de abrir una nueva mina con 50 puestos de trabajo en el concejo de Lena. Javier Fernández debería por lo menos darle el próximo septiembre la Medalla de Asturias al valor. No es para menos