Hacía tiempo que no iba por la cuenca minera y me acerqué al campo de El Florán en Sotrondio para ver el I memorial Amalio García que enfrentó al San Martín y al Tuilla como homenaje al insigne vecino de la localidad, el empresario Amalio García, presidente del grupo Carbomed y que a sus 93 años continúa emprendiendo negocios y creando empleo que buena falta le hace esta región..
El Florán es un campo de fútbol con un excelente terreno de juego pero que en su aspecto exterior, que depende del ayuntamiento de San Martín del Rey Aurelio, deja bastante que desear. El alcalde del concejo Enrique Fernández que asistió al partido lo justifica diciendo que lo que hay en las arcas municipales no da para todos. Es la tragedia de la economía municipal, especialmente de los ayuntamientos de las comarcas mineras cuya población mayor crece mientras los jóvenes disminuyen registrando, además, la mayor tasa del país en paro juvenil.
Amalio García, feliz con el homenaje, hizo el saque de honor y recibió la insignia de oro del club como socio ejemplar que es. Allí se encontró con veteranos vecinos que recordaban cuando este empresario en su juventud jugaba como extremo izquierdo en el Asturias de Blimea para retirarse luego en el Titánico de Laviana. El presidente del San Martín es Olegario García, que recuperó el club del ostracismo hace unos años, situándole de momento en regional preferente. Olegario es de La Cerezal y desde hace años tiene un magnífico complejo hostelero con ese nombre en Collera (Ribadesella) en donde algunas veces me reuní de incógnito con el licorero Emilio Serrano, hijo predilecto del concejo, y no solo un excelente fabricante de licores de sidra sino también cronista de las muchas virtudes del oriente asturiano.
Mientras vemos a los chavales disputar el balón en El Florán, bonito acto que ha organizado el infatigable Luis Simón, el alcalde de San Martín del Rey Aurelio me comenta que hay que luchar porque no desaparezca la minería. No ve clara la promoción que HUNOSA hace del pozo Sotón, convertido ahora en teatro minero, mientras me comenta que el pozo María Luisa está en las últimas y el Pozo Carrio en Pola de Laviana no tiene para mucho. Sotrondio sufrió no hace mucho el cierre de dos industrias importantes, las de Alaeda y Ornalux que disponían de dos extraordinarias naves ahora en concurso judicial. La primera nave, menos mal, ha sido cogida por un grupo de empresarios de la zona para fabricar componentes de fibra óptica mientras la segunda, todavía en poder del Juzgado, seguro que pronto será adquirida para una nueva aventura empresarial. A todo esto, un buen augurio, el alcalde me confirma que en breve volverá a funcionar el reloj del ayuntamiento que cantará las horas entre las 10 y las 12 lo que espera no moleste al vecindario.
A la entrada del campo de fútbol me encuentro con un buen amigo de la minería, Angel Orvíz, que fue presidente de la Asociación de Vigilantes y quien en una segunda etapa ha vuelto a los órganos de dirección como contador del Montepío Minero. Angel OrvízOrvíz fue un minero de raza, hoy jubilado, pero que continua muy pegado a la cuenca del Nalón. Que sus deseos se cumplan con el Montepío. Luis Simón me comenta que el San Martín este partido estrena camisetas fabricadas por Jolubi. Me alegro. El empresario avilesino, José Luis, fabricante de ropa deportiva, además de lanzar gorgoritos en el Ochote de La Fresneda vuelve a apostar por Asturias. Es decir, ha cerrado sus fábricas en China, donde ya no es oro todo lo que reluce, volviendo a concentrar su producción de ropa deportiva en Avilés. A ver si algún día el Sporting o el Real Oviedo se acuerdan de él.