Mañana, día 8 de septiembre, celebramos los asturianos el día de nuestra Comunidad Autónoma.
Es, por lo tanto, un día festivo para nuestros conciudadanos, una conmemoración de nuestra Autonomía y una proclama de nuestra Región.
En el día de hoy, Señorías, nos encontramos convocados a este Pleno, como representantes de los asturianos, para oficiar la ceremonia más política de cuantas se realizan en esta fecha.
Es de justicia, entonces, que comience mi intervención ante el Pleno felicitando, en nombre de la Junta General y en el mío propio, a todos y cada uno de los asturianos.
Pero quiero detenerme un momento para recordar, con especial reseña, a todos aquellos asturianos que, obligados por las circunstancias en no pocos casos, tienen que celebrar el día de Asturias fuera de nuestra Región. Especialmente a muchos de nuestros jóvenes, a esa nueva emigración, que tienen que buscar lejos de nuestra Comunidad, su futuro y su proyecto de vida.
Aunque mi recuerdo hoy, y mi mención más sentida, es también para los casi 80.000 parados que tiene nuestra Comunidad y que tan amargo trance no les permite disfrutar plenamente de esta celebración. Deseo empiece a cambiar en los próximos meses.
Porque, Señorías, a la luz de este y otros datos, no me equivoco si digo que la situación de nuestra Región y de España, en este momento, no incitaría al optimismo.
Tan sólo con una mirada somera, podemos alcanzar a ver que esta legislatura, debido al escenario económico que vivimos, será decisiva para el porvenir de nuestra Asturias.
No hay duda de que, viendo las circunstancias a día de hoy, las acciones que se tomaron con anterioridad para mitigar esta profunda crisis han sido nada o poco efectivas y que la actualidad demanda, de manera urgente y acuciante, hechos y no palabras.
La realidad de Asturias nos apura ya más a la acción que a la reflexión, a la reforma que a la apatía. Nos obliga más al movimiento que a la locuacidad.
Porque, Señorías, son de sobra conocidos, y aceptados por todos los aquí presentes, los pilares más básicos y fundamentales que nuestra Comunidad necesita para salir de la crisis, que es la primera preocupación de los asturianos y también de los españoles.
Uno de ellos es el control exhaustivo del gasto público. Y, señorías, retomo mi compromiso hoy ante este Pleno y digo que esta Junta General instará, promoverá y tomará las medidas necesarias para controlar dicho gasto.
La eliminación de lo superfluo en la Administración debe ejecutarse ahora, no más adelante. No acometer esos recortes, andarse con componendas o bien retrasar, posponer o dilatar dichas actuaciones sería un ardid que defraudaría a los asturianos y que no nos perdonarían.
Por otro lado está la reducción de nuestro déficit público. No podemos gastar más de lo que tenemos. No debemos hipotecar el futuro de los asturianos. Es una cuestión de sentido común.
Y, finalmente, la regeneración y el fortalecimiento de nuestro tejido industrial y empresarial, así como el refuerzo de la protección social para que ningún asturiano quede excluido o al margen.
Señorías, estas son, grosso modo, las medidas que hay que llevar a cabo, de inmediato, para reflotar nuestra Comunidad Autónoma.
Y aquí quiero reiterarme: Ya no es tiempo de anuncios ni de ofertas. Es momento de cumplir nuestra tarea. Hace casi cuatro meses que los asturianos nos dieron en las urnas unas responsabilidades y debemos asumir, cada uno la suya, sin más demora. Los ciudadanos ansían una mayor actividad en sus gobernantes; un mayor acierto en nosotros para reorganizar con urgencia las condiciones económicas. De ello depende el porvenir de nuestra Región.
Por todo lo anterior, Señorías, les planteo esta Junta General como lugar de encuentro para llegar a los acuerdos que definan y materialicen éstas propuestas básicas.
Aquí, en esta Cámara, tenemos la obligación política ineludible de llegar a los pactos que deberán plasmarse en decisiones acertadas para los asturianos.
Todos, cada uno desde su perspectiva, debemos aportar nuestras ideas y proyectos. Además, la realidad parlamentaria, con la estructura actual del hemiciclo, en la que ningún grupo se acerca a la mayoría absoluta, viene a bendecir lo oportuno de esta proposición. Este Parlamento no puede, ni debe, ni quiere pararse.
Quiero proponer, también, un Parlamento fuerte como herramienta útil para canalizar las aspiraciones y las inquietudes de los asturianos. Para dar voz a las expectativas y los anhelos de nuestra sociedad.
Quiero reivindicar un Parlamento fuerte, pero no dominante; activo y capaz, complementario a un Gobierno en minoría por decisión de los asturianos, para sacar adelante, desde la lealtad y el concurso de todos, a nuestra Región.
Hoy, desde aquí, hago una invitación a la reflexión serena, al debate profundo y serio, al margen de cualquier intención partidista, tomando el pulso real a nuestra Comunidad Autónoma sin generar polémicas ni crear controversias vacías.
Asimismo, pienso que debemos trasladar este debate sereno, también, a la situación actual del Estado de las Autonomías. Una revisión sin apriorismos.
Racionalizar el Estado de las Autonomías es algo positivo e imprescindible en la actual situación, con el objetivo irrenunciable de que los ciudadanos mantengan la igualdad y calidad de los servicios públicos en cualquier lugar de nuestra Nación.
Los asturianos saben que no hay remedios milagrosos ni atajos, que sólo el trabajo duro y el sacrificio por parte de todos nos llevarán al éxito, pero, igualmente saben, y aquí si hay lugar para el optimismo, que su capacidad, su talento, su disposición y su genio son formidables.
Termino, Señorías, no sin antes felicitar efusivamente a los que hoy reciben las medallas y distinciones de nuestra Comunidad, los más distinguidos galardones que podemos otorgar.
Los premiados son ejemplo de virtudes cívicas, de compromiso con Asturias, de humildad y de esfuerzo. Fiel reflejo de la Asturias que trabaja, día a día, en pos de un futuro mejor para todos.
Por último, en este Pleno institucional del día de Asturias, y mañana en la celebración que realizaremos en la Basílica de Covadonga, le solicito a La Santina que nos ilumine en cada decisión que tomemos para beneficio de todos los asturianos.
Autoridades, Señorías, Señoras y Señores, asturianos feliz día de Asturias.
*INTERVENCIÓN DEL PRESIDENTE DEL PRINCIPADO EN EL ACTO INSTITUCIONAL DEL DÍA DE ASTURIAS EN LA JUNTA GENERAL DEL PRINCIPADO
4 comentarios
# sofi Responder
18/02/2013 17:25Me siento muy "yo". No tengo facebook ni whatsapp (no me gusta), uso mi ropa hasta que se estropea, conservo a mis amigos de la infancia y los veo mucho (nos apreciamos como somos). Estoy bien haciendo cosas con mucha gente o en solitario.Vivo a mi manera
# Mireia Responder
22/02/2013 08:37¿Quien soy?difícil pregunta,m doy cuenta q cuando intento responderla siempre digo:q hago,como m llamo,d donde soy...pero no responde ciertamente a quien soy, no sabemos responder a ella. Quien soy...una persona q no para de cambiarla la vida y aprender.
# José Ángel Caperán Responder
22/02/2013 13:06Cierto!! Es muy difícil decir quién soy sin hacer en relación a algo o a alguien. Y esta incapacidad de definirnos es el primer indicio de la falta de control sobre nuestra vida y de la baja confianza (porque nos desconocemos) en nosotros mismos.
# gijonesa Responder
23/02/2013 18:21soy alguien que aún se sigue "descubriendo" después de llevar bastantes años viviendo.