Los papeles de Panamá en España confirman que la corrupción es una doble traición
La corrupción de nuestras élites vinculadas o cercanas al poder político, de las grandes fortunas y grandes oligopolios que evaden impuestos y ocultan su dinero y su patrimonio en los paraísos fiscales, y de la oligarquía bancaria que ampara las operaciones oscuras de sus clientes más ricos, son una doble traición al país y al 90% de los españoles.
A la vista de las consecuencias que la corrupción, acelerada ahora por los “papeles de Panamá, está teniendo en nuestro país, como en el resto del mundo. Y del interés mostrado por organismos como el Departamento de Estado norteamericano, la afirmación de que la corrupción es traición cobra todo su sentido.
Sabemos que en esos papeles no aparece ningún personaje económico ni político de EEUU. Sabemos que el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación, está financiado por grandes fundaciones estadounidenses y en relación estrecha con los servicios de inteligencia de EEUU. Sin embargo, EEUU, ahora ya sale en los grandes medios de comunicación, se está convirtiendo en el paraíso fiscal favorito de las grandes fortunas. Los Estados de Nevada, Dakota del Sur, Wyoming y Delaware son la “nueva Suiza” que atrae cada vez más dinero libre de cargas fiscales y a cubierto de los gobiernos de origen.
En unos casos se corrompe para intervenir, y en otros casos es un instrumento con el mismo objetivo: intervenir la política y la economía de un país. Por ello, en todos los casos la corrupción es traición a la inmensa mayoría de la población y al país.
La corrupción en las élites políticas, las instituciones, los partidos o los sindicatos es un canal abierto a la intervención extranjera, especialmente de la superpotencia estadounidense, siempre dispuesta a utilizarla al servicio de sus intereses: para remover políticos, forzar procesos o reconducir situaciones no favorables a sus proyectos. Y además es un expolio de las riquezas nacionales, bien ocultándolas en los paraísos fiscales o bien entregando sectores importantes de la economía a precio de saldo.
Doble traición que hoy está al servicio del proyecto de saqueo y expolio de las rentas del 90% de la población y la riqueza nacional, base de todos los recortes.
Una traición de tan graves consecuencias para los ciudadanos y el país sólo se puede tratar como a las peores mafias del crimen organizado. Recortes Cero propone una reforma del Código Penal que dé ese tratamiento y permita perseguir por igual tanto a los políticos corruptos como a los bancos que ayudan a ocultar el dinero o evadir impuestos y las grandes empresas y multinacionales que financia y se benefician de la corrupción.
Recortes Cero propone también una reforma del Código Penal para anular la prescripción de los delitos económicos y fiscales, así como las amnistías fiscales que son, de hecho, auténticos agujeros negros de impunidad por la que los corruptos y evasores legalizan los frutos de sus fechorías. Y estableciendo mecanismos que permitan retornar al país los recursos expoliados y que tanto “corruptos” como “corruptores” estén obligados a devolver el dinero robado.
