Entre fútbol y política, amordazados los toros, poco tiempo nos queda a los españoles para lo verdaderamente importante y que de verdad nos preocupa y que desde el Arcipreste de Hita se resume en ganarse los garbanzos , crear y mantener una familia, considerarse útil , o sea el empleo, pues sin éste no hay proyecto, estabilidad, patria ni arraigo que valga, sin éste todo incomodidad tiene asiento.
Hace unos días , en charlas entre amigos, lamentaba la contaminación acústica a la que uno estaba sometido, incluso en los transportes públicos, ya sean trenes, Albias, Aves o líneas regulares de viajeros, donde las continuas e inoportunas llamadas de móvil impiden la relajante y provechosa lectura ,el deleite de contemplar un paisaje desconocido y menos aún pensar, recordar …Contaminación visual y acústica que se ha acelerado estos últimos días, por los motivos de todos conocidos de vestir o desvestir un presidente.
En esas estábamos cuando llegó el día 4 de marzo y mientras en la Cámara Baja se buscaba la investidura del aspirante por mayoría simple con las cartas marcadas y el resultado ya conocido de antemano, tuve el privilegio de asistir al Acto Académico de Imposición de Becas a los alumnos de la XXXVI Promoción del Colegio Los Robles, donde uno que ha sido testigo de casi todos los Actos, pudo constatar que se han cumplido los pronósticos y ellos, protagonistas del día, los alumnos, nos han hecho pasar a familias, profesores y amigos, un día muy feliz… Mientras, repito, a esa misma hora el Congreso se llenaba de tensión , ruido, voces, griterío, pataleo. La prensa habla de “bochorno”. Parece que sigue habiendo dos Españas: a)la real, la que trabaja, reza o celebra, como hacíamos en ese momento en el Cole, y b) la España oficial, la de la farándula, de la comedia sin desenlace, abierta, que se representaba en el Congresos de los Diputados con 350 personas.
En el Colegio el acto empezaba por el orden que la Institución siempre ha marcado: Misa de Acción de Gracias, Imposición de la Beca a la Virgen de los Robles y después Acto Académico propiamente dicho que en esta ocasión se inició con una Conferencia impartida por un antiguo alumno del Colegio, Don Pablo Älvarez Álvarez - redactor de La Nueva España, especialista en temas de sanidad y ciencia, con varios libros en su haber - titulada “Elogio del equilibrio”, donde como buen narrador de noticias ha buscado la nominación adecuada para generar incertidumbre, zozobra, inquietud , estupor… Todos nos preguntábamos “por dónde saldrá éste, qué nos dirá…” y es que ya somos muchos los españoles que subconscientemente pedimos el fin de esta sociedad bipolar donde incomprensiblemente y a velocidad de vértigo se pasa de la cárcel o al sillón o viceversa , sin las debidas y justas explicaciones.
Como es de suponer no estaba en el Programa , alumnos de la XXXVI Promoción, que hoy, 4 de marzo, y casi a la misma hora que este Acto , tenga lugar la investidura o no de un aspirante a la Presidencia de Gobierno, pero esta coincidencia os va a marcar para siempre y desde ahora sois los alumnos de la investidura… pero ya vuelto al relato, según el ponente, el equilibrio se consigue con virtudes- lo que otros llaman valores- centradas en el respeto a las personas, con lealtad a los demás y especialmente a uno mismo, pues sólo se puede ser feliz , que es el objetivo tendencia, constante y final, si uno actúa conforme a su conciencia y se preocupa que ese patrimonio suyo, esa herencia suya sirva, sea útil a los demás , pues creo que nadie haya tan ingenuo o soberbio , si está bien formado, que crea que todo se lo deba a sí mismo. ¡Por favor, no te engañes a ti mismo! No nos hubiera importado que la conferencia hubiera durado la hora y cuarto que prometió el conferenciante.
Decía García Márquez que la palabra prevalece sobre la imagen y buena prueba de ello tenemos en este Acto donde la palabra fue la gran protagonista. Así al concluir la conferencia, toma el turno Don Ignacio Blanco, Profesor Encargado de este Curso, que con la ayuda de unas imágenes, glosó los muchos méritos de esta promoción ( esfuerzo, rendimiento académico, confianza, generosidad, deporte…), así como alguno de sus errores, y todo ello avalado con imágenes o anécdotas (convivencias, Visitas Culturales, conferencias). Hizo especial hincapié en la importancia de la norma , de la lealtad y de la autoridad en la labor docente para poder avanzar, mejorar, progresar. No hay duda que el tiempo pasa veloz, y que es difícil condensar doce años de vida colegial en unos minutos. Terminada su documentada y excelente intervención se impuso las Becas de Honor a los alumnos de la XXXVI Promoción: fotografías, saludos, abrazos…y nuevamente la Palabra, en este caso una madre, la de Älvaro, la señora Barbes, que después de felicitar a todos y desearles lo mejor, nos deleitó con unas citas o relatos literarios de la máxima utilidad y belleza, que me es imposible sintetizar en estas líneas, pero creo que la cita introductoria de Zubizarreta cuando terminó su vida deportiva en el Barcelona habla por sí sola:”¡Señores, se acabó el recreo!” . La Literatura, la vida, revestida de didáctica, de moralidad, de provecho.
La fiesta de la Palabra continúa, aún le falta un protagonista, un alumno, un súper-Luis, árbitro, internauta, emprendedor , aplicado, generoso Luis, y que siempre que le veo le dijo :”¿Quién es el mejor amigo que puedes hallar?”… La respuesta sólo la sabemos él y yo. Para ordenar su exposición acudió a los planetas y éstos le fueron recordando las diferentes etapas de la vida de su promoción, hasta llegar a la estación actual, Júpiter, el dios supremo del Olimpo y hablarnos de cuitas, aventuras, fantasías, aficiones, ilusiones a la vez que recordaba anécdotas, vivencias, tensiones, nervios, exámenes, lecturas... Terminó su discurso dando gracias a los padres y recordó a todos sus compañeros que desde ese momento tienen el gran mérito de pertenecer a la XXXVI Promoción del Colegio Los Robles y como tal tienen que actuar en las penas y en las alegrías.
Se iba haciendo tarde, la noche avanzaba y ya iba siendo hora de terminar la cita, el encuentro, y fue el propio director, Don Ängel Gallo quien después de una breve semblanza de la promoción , de sus éxitos académicos y deportivos – al fin habían conseguido doblete, algo casi imposible, ganar en fútbol y baloncesto a los profesores – y de agradecer a las familias la confianza depositada en el Colegio, su Colegio , dio por concluido el Acto, no sin antes levantarse todos y entonar el “Gaudeamus”.
Concluye la jornada con un suculento aperitivo que tiene como principal ingrediente la compañía, la conversación, la charla, la escucha, el oído, la palabra... Los leones de las Cortes siguen estáticos, no pestañean, no braman, no tienen vida, indiferentes, son de piedra…. La XXXVI Promoción ríe, salta, celebra, canta y confía en el futuro, en un mundo mejor, en un mundo más humano, más feliz. Tiene vida, ilusiones, esperanzas y de ello nos darán cuenta.
A Napoleón – no sé si es políticamente correcto citarle- le preguntaron un día a qué edad se había de empezar a educar a los hijos y respondió: “Veinte años antes de que nazcan, educando a los padres…” Y ésta es la gran ventaja que siempre ha tenido nuestro Colegio y es que siempre hemos tenido unos padres excelentes y eso se nota.
¡Enhorabuena a todos¡