Me vas a perdonar que insista pero esta noticia da idea cabal de lo que es este país: Ocho detenidos por estafar a 200 personas ofreciendo empleo público sin examen a cambio de dinero. ¡¡Doscientas personas dispuestas a prevaricar pagando!! ¡¡Qué se lo creían de verdad!! ¿Cuál es más de culpar? ¿El que peca por la paga o el que paga por pecar?

Me recuerdan a Triana y su madre, ofendidas porque no le habían dado a la niña un puesto de ingeniera fijo en la Diputación de León y pretendían que hiciera un examen como el resto. ¡A dónde podíamos llegar!

Estamos hablando de la Comunidad de Castilla y León, pero puede pasar en cualquiera, porque, desgraciadamente, en este país los puestos se repartían así desde Cánovas y Sagasta y por más que se lleve luchando desde la transición por un empleo público de calidad basado en los criterios de igualdad, mérito y capacidad en el acceso, la mentalidad chamullera imperante nos devuelve al franquismo, cuando el acceso a la Administración estaba vetado a quien no fuera afín al régimen.

Y así seguimos, cada uno en función de su implantación territorial, PSOE y PP, manejando la Administración como su cortijo. Y en vez de correrlos a gorrazos, les votas, y en lugar de aspirar a la decencia y denunciar malas prácticas, engañas, robas, pagas y matarías por ser como ellos: un chorizo.

Mi reino no es de este mundo…