El alcalde de Oviedo acompañado del concejal de Cultura y de los tres miembros del consejo de administración del Real Oviedo, además del representante del grupo mexicano Carso, propietario del club, inauguraron de manera algo vergonzante un monolito en honor de los 90 años del histórico club Real Oviedo. Un monolito situado en la calle Gil de Jazdonde hasta 1972 estuvo la sede del hoy desaparecido diario La Voz de Asturias propiedad entonces de los Tartiere, uno de los cuales, don Carlos, fue presidente y protagonista de aquella anécdota cuando en el Oviedo jugaba de portero el gran meta portugués Carlos Gomes quien un domingo al deberle el club 10.000 pesetas de las de entonces se negó a vestirse para saltar al campo minutos antes de dar comienzo un partido manifestando en su pobre castellano: "Sino hay dinero, no hay goleiro". Informado de ello el presidente Carlos Tartiere que se encontraba en el palco ni se inmutó, bajando al vestuario y tirando de cartera para saldar la deuda del club con el meta portugués. Dicen los cronistas de entonces que Carlos Gomes, el gato que siempre jugaba vestido de negro, hizo un partido sensacional mientras las 10.000 pesetas reposaban en su cartera.
Pienso que este acto en la calle de Gil de Jaz había que haberlo publicitado mucho más, haber invitado a la asociación de veteranos, a la banda de gaitas y tambores y hasta los del Sporting si me apuran, pero el tripartito parece actuar algo vergonzante respecto al club. La verdad es que el domingo que juega el Real Oviedo contra el líder Alavés en el estadio Carlos Tartiere me gustaría ver en el palco a la vice alcaldesa Ana Taboada y al concejal de economía Rubén Rosón además del alcalde.
Entre tanto los días pasan y aún el tripartito no ha fijado el día para celebrar el pleno sobre los presupuestos pactados entre los grupos del PSOE, de Somos y de IU y que por el momento los ciudadanos de a pié desconocemos. Fuentes de Somos afirman que ellos los tienen los tiene ya cerrados pero alguna discrepancia debe de existir con PSOE e IU que no acaban de hacerse públicos. Y es que pasan los meses y aún no se ha metido mano a los grandes temas, limitándose el equipo de gobierno a prorrogar contratos. Mayo está a la vuelta de la esquina y entonces se habrá cumplido un año de la actual legislatura autonómica y municipal. En el seno de la Junta General del Principado continúa la tensión entre el grupo socialista y Podemos. Lo cierto es que Javier Fernández no puede ver a los nueve diputados que encabeza Emilio León mientras el segundo grupo en número de sillones, el PP con 12, aparece un poco aplanado por los casos de corrupción que se están dando tanto a nivel provincial como estatal en sus huestes. Hace unos días estuvo en Oviedo Dolores de Cospedal para levantar los ánimos pero tengo la sensación de que no lo ha logrado. Si al final, como parece ser, Mariano Rajoy no repite como presidente del gobierno de la nación, habrá movimiento de banquillo en varias instituciones y empresas estatales en el Principado. Por ejemplo, Gabino de Lorenzo o Teresa Mallada y también Isabel Pérez Espinosa, por citar.