Después de cerca de dos meses retomo la palabra escrita, la otra siempre la tuve al día. Estuve fuera de este medio por culpa de un maldito virus (informático) no se me vaya alarmar el personal. Del otro, el que pulula sobre todo por los hospitales... Dios me libre. Por sms, email y en vivo mi entorno estaba preocupado por mi ausencia/silencio en poder ver mis "cosiquines" en este medio digital.
Primero, un amigo que se llevo el portátil para con calma en sus vacaciones hacerme una puesta a punto y luego las mías, la cosa se fue dilatando en el tiempo. Ayer, fue el reencuentro. Así, que no sé por dónde empezar a contaros dimes y diretes. Como no sabéis por dónde estuve este verano, puede ser un buen inicio.
Durante el mes de julio, los fines de semana los pasaba en el "Mayau" de los "Collainos" en la cabaña que tenemos a la vera de la estación invernal de Fuentes de Invierno junto a mi madre, ya que este verano era el primero tras la partida definitiva de mi padre. Para ya la segunda quincena de agosto asentarme definitivamente entre aquellos riscos, vacas. ovejas y la gente ganadera que con tanto mimo no solo cuidan de sus rebaños sino del entorno. No falte a la misa al aire libre en honor a la Virgen de las Nieves.
Como todos los veranos tuvimos que decir que no a varias personas que se empeñan en comprarnos la "cabaña", gente sobretodo de Portugal que vienen en la temporada de nieve.
Mientras viva, mi intención y compromiso con mis padres es no venderla. Como me queda media docena de años para no tener que fichar mas, espero pasar largas temporadas y dedicarme a mis aficiones personales, como son: el senderismo, la lectura/escritura y escuchar música.
Será como estar ya en el paraíso, mi vergel, sin ataduras, sin compromisos. No sé, según pasan los años cada vez me encuentro más feliz. Antes añoraba, soñaba con cosas utópicas que me hacían sufrir, ahora, con menos necesidades, menos frustraciones.
Cuatro amigos (de los de verdad) y un día mas de vida... me sobra para disfrutar cada minuto como si fuera el último. En este primer encuentro, cosas propias, ya tendré tiempo de hablaros de lo que pasa por ahí. Ya os adelanto que la otra quincena de vacaciones que me quedan por gastar, las pasaré con mi madre y mi sobrina que se acaba de apuntar,
iremos nuevamente a la isla de Lanzarote, pero esto ya será para noviembre. No quisiera concluir este articulo sin tener unas líneas de apoyo sin fisura alguna a los refugiados que en este presente tiempo están viviendo un éxodo que ojala tengan un destino/puerto seguro dónde puedan realizar todos sus anhelos/sueños. Hay que ser solidarios, no mirar hacia otro lado, tenemos mil formas de colaborar, los medios informativos y las oenegés ya nos están informando de dónde poder colaborar.
A los amigos de siempre, a los que creo tener al otro lado de esta pantalla de plasma, he vuelto...he resucitado. Un abrazo sincero.