Llegó el momento de la verdad, el de la tercera votación para elegir presidente del Principado. Será este martes a las 12,00 horas una vez que Javier Fernández comunicara a Pedro Sanjurjo que ya tenían los cinco votos de Izquierda Unida en el bolsillo, prisa que por cierto ha causado malestar en alguno de los grupos.
Javier Fernández con sus 14 votos más los 5 de IU deberá tener una mayoría minoritaria que le permita forman nuevo gobierno y estar al frente del Ejecutivo otros cuatro años. Mercedes Fernández, el PP, contará con sus once votos más los tres de Foro mientras Ciudadanos tiene previsto abstenerse. Su cabeza de lista, el allerano Nicanor García, disfrutaba este medio día en un restaurante de cinco tenedores y en agradable compañía. Le vi relajado, como quien no quiere la cosa, en camisa y sin corbata, claro que si la situación se complica siempre los de Ciudadanos estarían dispuestos a votar de manera que no haya empate y, por tanto, riesgo de terminar Asturias en unas nuevas elecciones. Y es que los de Podemos, que son unos cachondos, están esta tarde estudiando la posibilidad de que cuatro de sus diputados se abstengan y cinco voten a Mercedes Fernández con lo que se produciría de nuevo un empate entre los candidatos del PSOE y del PP.
Lo cierto es que Asturias es la única comunidad autónoma que aún no ha elegido presidente con una administración poco menos que paralizada y la mayoría de los cajones de los cargos de confianza vacíos. Si mañana no hay problema y Javier Fernández es elegido el viernes se celebraría en la Junta General del Principado el solemne acto de toma de posesión con asistencia de un ministro del gobierno de la nación, seguramente Ana Pastor, la titular de Fomento, que de tiempo atrás, y pese al retraso en nuestras infraestructuras, mantiene una buena relación con el ingeniero mierense.
Con el acuerdo entre PSOE e IU Gaspar Llamazares, artífice del mismo, aunque la consulta a las bases en mi opinión fue un fracaso dada la escasa participación además de un 45 por ciento en contra, el veterano diputado cree tener cogido por los cataplines al PSOE para forzar una mejora social de las clases asturianas más necesitadas. Esperemos que dicho acuerdo no se convierta en papel mojado como lo ocurrido en la pasada legislatura entre PSOE y UPyD.
Esto me trae a la memoria la situación en que se encuentran, por ejemplo, las residencias de mayores del Principado que desde hace años están gestionadas por organizaciones sin ánimo de lucro, caso de la Federación de Mayores del Principado de Asturias (FAMPA) lo hace en Quirós y Terverga- y Mensajeros de la Paz caso de Soto de Luiña, por ejemplo.
El Principado, por razones que se me escapan, ya desde los tiempos de Esther Díaz como consejera de Bienestar Social, quiere privatizarlas y así ha convocado un concurso que acaba de ser impugnado por los actuales concesionarios y con el que tampoco está de acuerdo el citado Llamazares.
La FAMPA, por ejemplo, agrupa a 70.000 mayores en toda Asturias y el otro domingo en Llanes reunió a 4.000 en la fiesta anual que realizan cada año en un concejo. De Mensajeros de la Paz ¿Qué les voy a contar?. La labor del padre Angel y su equipo es ingente y solidaria y su mano derecha en Asturias, en este terreno de las residencias, José Ramón, es persona eficaz en la gestión y con una gran experiencia. En pocas palabras, espero que el nuevo gobierno de Asturias recapacite al respecto y deje las cosas como están. El tan tan político me indica que es posible que la nueva consejera de Bienestar Social sea la ex alcaldesa de Avilés Pilar Varela. Seguro que no lo hará mal. Del resto, pronto lo sabremos.
