Mucho tienen que aprender algunos de nuestros personajes públicos de la sencillez y cercanía de uno de los hombres más ricos del mundo, Carlos Slim, propietario del Real Oviedo, que en su primera visita a nuestra ciudad para asistir al partido de ascenso del club ovetense a la segunda A paseó como un ciudadano de a pié más por la zona centro, se fotografío con aficionados posando para ciento y una cámaras e interesándose como un turista cualquiera por las características de la capital de Asturias.
Pero a lo que quiero referirme en este comentario es a uno de sus acompañantes, el cura mierense Angel García, presidente de "Mensajeros de la paz", el mejor pastor de ricos que he conocido y que con su encanto y afabilidad logra que colaboren en su gran obra social, esa que inicio hace 50 años en Oviedo a través de "La Cruz de los Angeles" en compañía del entonces también cura Angel Silva.
No hace dos días que recibí un mensaje de padre Angel desde Nepal a donde se había trasladado con un importante cargamento como ayuda al pueblo nepalí cuando, pocas horas después, le encuentro haciendo de cicerone por las calles de Oviedo para una de las personas más ricas del mundo, Carlos Slim, en su primera visita a la capital de Asturias.
Verle ahora en compañía del financiero mexicano, también acompañado por su colaborador Pérez Simón, me hace recordar los tiempos siempre difíciles del padre Angel en su lucha contra la desigualdad social y también, Por qué no decirlo?, incomprendido muchas veces por la propia autoridad eclesiástica. El padre Angel es un personaje irrepetible en esta sociedad materialista y egoísta en la que vivimos. Creo que no hay lugar en la tierra donde haya ocurrido una catástrofe que no haya visitado aportando ayuda material y espiritual. Pero su imperio, vamos a calificarlo así, no sería hoy realidad si la clase alta, vamos a calificarla también así, no le hubiera abierto sus puertas, escuchado sus peticiones y aportando granitos no de arena sino de oro.
El padre Angel sabe perfectamente donde tiene que estar, por ejemplo hoy aquí, con Carlos Slim en Oviedo, y sin duda su pastoreo social a los ricos da resultado, bien sean políticos, artistas, financieros No solo maneja a la perfección sus relaciones con la clase dirigente sino también sabe tocarnos a los profesionales de la comunicación el corazón para que en la medida de muestras posibilidades le echemos una mano. Hace un tiempo tuvo el detalle de regalarme una pluma como recuerdo de los 25 años de la Cruz de los Angeles, a cuya fundación asistí siendo entonces Vicente Enrique y Tarancón arzobispo de Asturias. La guardo como el oro en paño y sobre ella prometí en la intimidad hacer lo posible para ayudar siempre a la obra del padre Angel.
No me cabe duda de que la presencia de este modesto pero inteligente cura de Mieres junto al propietario del Real Oviedo, Carlos Slim, al que seguramente no conoció personalmente hasta ahora, traerá mañana suerte a nuestro equipo. Lo siento por los del Cádiz.