La maquinaria electoral arranca esta medianoche (cuando esto escribo) para el lector cuando lea esto mañana ya habrán pasado unas horas. Este año el primer tren sale desde Andalucia, luego cambiaremos de anden y nos subiremos a los vagones que nos llevaran a nuestro entorno mas cercano. Pasado el estío veremos a los catalanes inmersos en su quimera. El postre sera para todos llegado el mes de noviembre.
Cuatro elecciones en el mismo año es poco usual. Carteles, anuncios en prensa y tv, tertulias, entrevistas, debates y encuestas hasta decir basta. Promesas, sueños, mentiras. Por la calle, los que vemos tras la pantalla, nos darán la mano a la par que te harán entrega de una octavilla (como el que te pide una limosna), ellos te solicitan con una farsa sonrisa el "voto". Tranquilos, amigos, en cuatro años no los volverás a ver. Ese poker de años, lo pasaran en un hemiciclo debatiendo entre lo divino y lo humano.
Algunos llevan desde que se marcho Pachu y otros intentarán por vez primera asomarse a la atalaya para contemplar el panorama. Diputados llevarán por nombre con los votos que les dimos. Privilegios tendrán a nuestra costa. Se llenarán la boca de que trabajan para y por el pueblo.
A nosotros, los que les dimos vida, nos quitaran la poca que nos queda con sus decisiones. Te bajan los impuestos el año electoral, maquillan los contratos el año que nos piden el voto, cheques para los que usan dodotis, parches para las pymes/autónomos. El iva no lo tocaran, ya tendrán tiempo para cambiar de opinión
Cuando ya lo tienen todo bien atado, nos esperan los siguientes tres años (de mandato) de subidas y atropellos. Marionetas somos en sus manos. Ciclos electorales de burdas mentiras, falsas promesas y desilusiones.
A lo lejos asoma una coleta, como era aquello que se decía, de cuando las barbas de tu vecino veas...es que me pierdo. Miedo... a qué ?