Si a sus señorías les queda algo de tiempo libre -las comisiones sobre el caso Villa y El Musel lo absorben todo- la Junta General del Principado aprobará la próxima semana, tras el visto bueno del gobierno asturiano, una nueva entidad de derecho público, el Colegio Oficial de Periodistas de Asturias, siguiendo los pasos dados en ese sentido en otras regiones. Tras casi un año de gestiones impulsadas a través de la Asociación de la Prensa de Oviedo los partidos con representación parlamentaria van a dar el sí por unanimidad. El colegio es una vieja aspiración de parte de los profesionales asturianos de la comunicación, principalmente de la gente joven, que fue asumida por la Asociación de la Prensa que preside José Antonio Bron tras pronunciarse por mayoría a favor del colegio sus afiliados quedando claro que en su momento, ahora llega, el profesional del periodismo podrá decidir si continúa en la Asociación o se apunta al Colegio o bien permanece en ambos.
La Asociación de la Prensa con cien años de historia a la espalda es, en definitiva, un sindicato profesional, sin connotaciones ideológicas como ocurre, por ejemplo, con la UGT. El colegio, como digo, es una entidad de derecho público que debe velar por la pureza de la profesión y su situación profesional. En Asturias en estos momentos estamos afiliados a la Asociación de la Prensa más de 300 profesionales y calculo que la mitad se dará de alta en el colegio. Lo que me preocupa es como habrá que financiar el mismo teniendo en cuenta que nuestra situación no es la de los ingenieros, arquitectos, abogados, etc. profesiones al fin y al cabo liberales lo que les permite sellar y cobrar proyectos destinando el correspondiente porcentaje a sus respectivos colegios.
La clase periodística está siendo duramente afectada por la crisis que ha destruido medios y puestos de trabajo siendo prácticamente en un 95 por ciento trabajadores por cuenta ajena. Los periodistas somos en estos momentos empleados de empresas, estamos en el paro o jubilados. Partiendo de la base que el nivel salarial es más bien bajo no estamos en situación de sufragar con generosidad las necesidades de un colegio al que para empezar hay que buscarle un domicilio social.
Conste que no estoy en contra de él pero la verdad es que lo veo poco factible reconociendo que para mi clase profesional es mejor tener un colegio profesional -da más pisto- que estar afiliado a un sindicato por muy profesional que resulte. La profesión además tiene nubarrones permanentes como es el intrusismo lo que a la gente joven que cada día sale en mayor número de las facultades de comunicación preocupa por reducir aún más los puestos de trabajo disponibles. A ellos hay que añadir la temporalidad en el trabajo puesto que las empresas, como la mayoría de este país, suelen ofrecer contratos por periodos concretos.
En unos momentos en que parece que la destrucción de empleo para periodistas se ha detenido, aunque tampoco hay signos de brotes verdes, en Asturias me da la impresión de que la clase periodística va a dividirse: Asociación de la Prensa o Colegio profesional. Veremos a ver como se desarrolla la nueva situación en este año recién estrenado.