Una sentencia de la Audiencia Nacional obliga a la concesionaria de Coca-Cola en España a readmitir a los trabajadores, afectados por un ERE, en sus puestos de trabajo.
Ayer en la fábrica de Fuenlabrada de Madrid, una de las plantas afectadas por la sentencia, los trabajadores quisieron impedir su desmantelamiento por parte de una subcontrata.
La Policía Nacional, según las imágenes facilitadas por todas las televisiones nacionales, intervino para defender a los desmanteladores e incluso llegó a detener a uno de los trabajadores de la fábrica que pretendía entorpecer el desmantelamiento. Al final de la tarde quedó -como siempre pasa en estos casos- en libertad con cargos.
Hay una sentencia judicial que condena a la empresa que flagrantemente incumple y prosigue con su hoja de ruta ajena a los mandamientos legales. La razón y el derecho de los trabajadores son vulneradas y por sus reivindicaciones incluso son detenidos.
¿Alguien suficientemente cuerdo puede explicar lo que está ocurriendo después de la última reforma laboral?