Queridos Reyes Magos:
Un año más, y cumpliendo con la tradición, os escribo mi carta plagada de buenos deseos individuales y colectivos.
En realidad es una recreación de la que os envié el pasado año. Cual niño malo, me trajisteis carbón y, además del malo.
Pero sé que lo que os pido es justo y, aunque la justicia tardía no es justicia, nunca me cansaré de luchar por las causas que son evidentes.
Ahí os va:
- Que los Reyes y su familia sean buenos.
- Que el Presidente del Gobierno deje de cometer pecados (mentir es un pecado).
- Que el Presidente del Gobierno sea consciente de que solo se puede hablar de recuperación económica cuando ésta llegue a las familias.
- Que los programas de los partidos políticos tengan el valor de un contrato con la sociedad cuyo incumplimiento genere responsabilidades patrimoniales para sus juntas directivas y para sus candidatos.
- Que se regule la responsabilidad patrimonial y penal de los gestores públicos.
- Que los gobernantes persigan el interés público y no su propio interés.
- Que se exhume a Montesquieu y se recupere la división de poderes.
- Que se admita que el aborto es una cuestión personal y no un asunto de Estado.
- Que Rajoy nombre Ministro de Industria a una persona competente que ni engañe ni se deje engañar.
- Que se derogue la Ley de Tasas.
- Que el Gobierno deje de ser fuerte con los débiles y débil con los fuertes.
- Que la prioridad de los políticos sea el empleo de todos los españoles y no sólo el de parientes, amigos y correligionarios.
- Que el sector público deje de ser la mayor empresa de empleo familiar del país.
- Que se reconozca que los eventuales no existen por necesidades de la Administración sino de los políticos y, por tanto, que dejen de tener la consideración de empleados públicos y pasen a ser retribuidos con cargo a los presupuestos de los partidos políticos.
- Que se respete a los funcionarios y se valore su contribución al buen funcionamiento de la Administración y a la consolidación del Estado de Derecho y del principio de legalidad.
- Que se elimine el abundante tejido adiposo de la Administración y que el resultante se aplique a fortalecer el fondo de pensiones.
- Que se aplique la máxima “un político un sueldo”.
- Que los cambios de Gobierno no parezcan cambios de régimen.
- Que los políticos recuerden que quien siembra privilegios recoge revoluciones.
- Que los políticos recuerden que no sólo hay que pensar en las próximas elecciones, sino en las próximas generaciones.
- Que los políticos recuerden que el poder corrompe, pero que el poder absoluto y sin controles, corrompe absolutamente.
- Que los políticos recuerden que en política no hay perdón; en política hay dimisión.
- Que los políticos recuerden que si a ellos les preocupan los tiempos, a los ciudadanos les preocupan los políticos.
- Que los políticos recuerden que la ética no enriquece económicamente, pero si moral y espiritualmente.
- Que los políticos recuerden que la presión fiscal tiene un límite que, sobrepasado, genera pobreza.
- Que los políticos recuerden que la mayoría absoluta no debe ejercerse con absolutismo.
- Que los políticos se jubilen cuando el resto de los empleados públicos.
- Que los cargos electivos y los de designación tengan el mandato limitado a ocho años.
- Que se supriman las subvenciones a los partidos políticos, a los sindicatos y a las organizaciones empresariales y que su importe se destine a mejorar las condiciones de vida de los más desfavorecidos.
- Que se aplique la normativa de incompatibilidades a la clase política.
- Que el Tribunal de Cuentas deje de contar cuentos y de ser refugio de políticos amortizados y se dedique a fiscalizar con rigor.
- Que se elimine el Senado.
- Que los ex Presidentes dejen de ser miembros natos del Consejo de Estado.
- Que se eliminen los privilegios de los políticos y, sobre todo, de los ex políticos.
- Que dentro del poder ejecutivo se respete la división de funciones: los políticos dirigen, los funcionarios tramitan expedientes.
- Que el poder judicial sea independiente.
- Que los jueces motiven sus decisiones y, en caso de incumplimiento, sean sancionados.
- Que se prohíba a los miembros del Poder Judicial participar en programas televisivos, de radio, y conceder entrevistas a los medios de comunicación.
- Que se juzgue a las personas por los hechos que cometieron, no por lo que son.
- Que los juzgados dejen de ser platós de televisión y circos mediáticos.
- Que recuerden los jueces que la seguridad jurídica es saber a que atenerse.
- Que el acceso a la carrera judicial sea siempre por oposición
- Que los jueces respondan por sus errores
- Que los jueces no apliquen el derecho penal simbólico.
- Que se garantice el importe de las pensiones y su revalorización.
- Que se trate a los ingresados en los hospitales con respeto a su condición de personas y a su dignidad.
- Que se elimine el copago sanitario.
- Que se preste la ayuda necesaria a los dependientes y a sus familias.
- Que se pongan los medios necesarios para evitar que haya anuncios que digan que en España uno de cada cuatro niños pasan hambre.
- Que los periodistas informen, no deformen.
- Que a los asturianos en general y, en particular, a mi “tocayu” Ignacio de Loyola, por brindarnos este acreditado medio para expresar nuestras opiniones y a mi admirado Xuanín por los atinados y certeros comentarios que nos dedica, el año 2015 nos traiga salud, paz, felicidad, tranquilidad y amor, mucho amor.
Queridos Reyes Magos, sé que os pido mucho, pero recordad que mis deseos están exentos de egoísmo. No pido para mi, pido para todos y siempre con la aspiración de que la política sea una homenaje a la verdad y a la belleza de la vida. De ello nos beneficiaremos todos.