El pasado 17 de noviembre, hacía el mediodía, me encontré en los periódicos digitales una noticia que hizo mi digestión más ágil y logró que un rayo de luz, de alegría, de esperanza cubriese la tarde, y es que al fín , después de tantas desoladoras, corruptas e inapetentes noticias que hablan de un 25% de los niños asturianos en el umbral de la pobreza, de un 35% de consumidores que ya compra productos de segunda mano, o de que 242 personas han sido denunciadas por fraude en la aplicación de la Ley de la Memoria Histórica entre otras muchas... ,al fín, como decía, tenemos una noticia positiva y ésta no es otra que, afortunadamente en un país que se llama o se considera de Derecho o gobernado según las leyes que nos damos y acatamos todos los españoles, se va a aplicar la Ley, algo que no debería ser una novedad, sino algo innato, obvio, evidente, pero que los ciudadanos creemos que no se prodiga mucho, y es que el Fiscal General del Reino, don Eduardo Torres Dulce presentará próximamente una querella contra el Presidente de la Generalidad de Cataluña y alguno de sus colaboradores por no respetar la Ley en el territorio de su jurisdicción y después de haber sido apercibido claramente a ello por el Tribunal Constitucional.
¡Era hora! Aún escuecen mis ojos las imágenes irrespetuosas y ñoñas de la señora Mas fotografiando a su marido junto a una urna de cartón o las provocadoras palabras del mismo al final del simulacro electoral al declararse máximo responsable del evento, y que constituyen una falta de respeto a todos los españoles y especialmente al resto de los catalanes que ese día no votaron, que son la mayoría, y singularmente a los más necesitados que contemplan con estupor en que malgastan su tiempo y sus recursos los que dicen preocuparse de su futuro – recuerdo que Cataluña es una de las autonomías donde más crece el número de personas sin hogar, ni recursos…-.
Es cierto que tenemos un problema político, pero no de financiación, -pues desde el 90 se han suscrito unos siete pactos de financiación, el del año 2002 por unanimidad, se les han dado nuevas competencias con su correspondiente presupuesto e incluso se les han incrementado los porcentajes de impuestos importantes en ese periodo y no han servido para nada, pues al día siguiente ya era poco ,- y el problema político es que unos dicen una cosa en Cataluña y otra en Andalucía , o traducido al lenguaje de la calle para unos es más importante su granero de votos, sus ansias de poder –recordemos la época de Montilla, Maragall- que el cumplimiento de la Ley y la defensa de la integridad territorial. La nueva fuerza emergente, PODEMOS, se agazapa en el mero formalismo, defiende el derecho a la consulta, pero no dicen si acatan las consecuencias de la misma y si van a defender y proteger la inobjetable unidad de España. Al respecto sólo puedo decir que experimentos los justos, según manda el sentido común y a ser posible con gaseosa, y basta para ello recordar las tensiones innecesarias que generó el referéndum sobre la OTAN y las consecuencias fatales que hubiera tenido para España si hubiera triunfado el NO. Consulta que fue uno de los errores más graves cometido por el ex- presidente Sr. González y reconocido por él mismo.
No hace mucho un prestigioso columnista decía que España estaba en el quirófano y no tenía cirujanos. Hoy, unos días después, la realidad es diferente, y es que desde el campo del Derecho ha surgido un cirujano que con la Ley como bisturí y ceñido con la verdad de los hechos intenta recuperar la dignidad de las instituciones y por extensión la de todos los españoles que contemplamos avergonzados como se atropellaba la Ley, o sea nuestro marco de convivencia, un 9 de noviembre de 2014, veinticinco años después de la caída del muro de Berlín.
P.D Cataluña fue la cuarta comunidad autónoma que más votó a favor de la Constitución de 1.978. El 90’46% de los catalanes a favor, siendo su abstención del 32’09 y en Asturias del 38'21%.