Este pasado fin de semana la localidad zamorana de Valdescorriel, un bonito pueblo de 179 habitantes, ha sido escenario de las fiestas de la Santina de Covadonga que desde hace unos años el empresario Tomás Casado, presidente del grupo industrial IMASA, nacido en Valdescorriel pero de los 18 años afincado en Asturias –“tuve que escoger entre el Ejército y vuestra tierra, así que me fui para Avilés”- organiza en su tierra natal a través de la Asociación de Amigos de la Santina en Valdescorriel. Y en esta ocasión al día siguiente de ser ya y para siempre ilustrísimo, al haber recibido el pasado viernes de manos del presidente Javier Fernández la medalla de plata de Asturias, Tomás Casado trasladó el más puro espíritu asturiano a su localidad natal.
Como siempre ocurre, tras la misa en honor de la Santina de Covadonga cuya imagen ocupa un lugar preferente en la iglesia de San Salvador de Valdescorriel, en el propio templo se celebró el homenaje a dos vecinos de este pueblo de Zamora y a dos asturianos. El propio Tomás Casado dirigió la ceremonia, exponiendo los méritos de los cuatro homenajeados a quienes entregó un diploma recordatorio del reconocimiento de estos zamoranos y una insignia de oro.
Por Valdescorriel se homenajeó, en un templo abarrotado, a Eladio Páramo Villar y familia, padre, por cierto, de la alcaldesa Míriam Páramo, y también a título póstumo a Eladio Luis Santos González siendo sus padres, muy emocionados, los que dieron las gracias.
Por la parte asturiana recibió la distinción el presidente del Centro Asturiano de Oviedo Alfredo Canteli, tevergano como era la esposa de Tomás Casado, y conocedor del empresario desde prácticamente su infancia. El organizador del acto explicó el curriculum del presidente del Centro Asturiano de Oviedo, resaltando no solo la magnífica labor que realiza desde hace años al frente del mismo sino la que hizo en su anterior vida laboral como ejecutivo de Banesto.
Alfredo Canteli agradeció las palabras y expresó su querencia de siempre a esta tierra castellana tan relacionada con el Principado a través de personas como Tomás Casado.
Para mi sorpresa el segundo homenajeado asturiano fue el que suscribe lo que atribuyo al afecto que desde hace años nos tenemos el presidente del grupo IMASA y este periodista ya en el cincuentenario del ejercicio de esta querida pero nada fácil profesión. Ha sido al primera vez en mi vida que me homenajean a pié de altar, bajo la bendita mirada de la Virgen de Covadonga, lo que sí, en cierto modo, te produce una emoción especial.
Tras el acto los vecinos, aprovechando el buen tiempo, se lanzaron a la romería en la plaza del pueblo al ritmo de la música del cuarteto “Son de Aller”, romería que me dio pie a saludar, entre otros muchos asturianos, a un antiguo compañero del departamento de comunicación de HUNOSA, José Antonio Oca, casado con zamorana y que esta temporada reside en una localidad vecina
Al día siguiente, ayer, domingo, la fiesta continúo, como marca la tradición, en la finca Valdelapuerca donde Tomás Casado no solo también ha levantado una pequeña ermita en honor de la Vírgen de Las Mercedes, sino también embotella vino de cosecha propia y hasta hace poco criaba caballos de pura raza.
Como manda la tradición la Santina de Covadonga, portada por Agata Casado, hermana del organizador, fue trasladada en procesión desde la ermita hasta la sala de caza donde el párroco del Valdescorriel Lorenzo López Asensio hubo de improvisar la misa ante la aparición de densos nubarrones, misa que cantó, sigue en plena forma, Tina Gutiérrez acompañada al órgano por Nadia Chaviano. Hace unos años Tina Gutiérrez, gran colaboradora solidaria con Tomás Casado a través de la Fundación Pelayo, compuso una canción dedicada a este pueblo zamorano en el que Asturias ya no es una desconocida.
Como remate del acto y antes de la fiesta asturiana el más de centenar de vecinos de Valdescorriel presentes en la finca de Valdepuerca degustaron el tradicional menú de la vendimia: patatas con costilla y vino de la tierra. Por supuesto, se brindó más de una vez por Asturias y los asturianos. Gracias.