Comprendo el cabreo de la delegación asturiana en el congreso extraordinario del PSOE en el que Pedro Sánchez ha salido secretario general como estaba previsto. Asturias cada vez pinta menos en el concierto nacional, trátese del frente que se trate. El nuevo PSOE de los yogurines está en manos de andaluces y aunque Asturias sea junto con Andalucía la única comunidad autónoma donde viene gobernando desde hace décadas, salvo pequeños periodos a cargo del URAS y de Foro, ha venido perdiendo peso de los tiempos de Felipe González para acá. En los telediarios apenas apareció Javier Fernández, siempre con cara cariacontecida, siempre acompañado por su fiel escudero, el también mierense Jesús Gutiérrez. La verdad es que ayer solo le enfocaron un momento cuando se levantó para fundirse en un tímido abrazo con el también derrotado Eduardo Madina.
Será por lo de ingeniero de minas pero el caso es que la poderosa Susana Díaz, la auténtica lideresa a partir de ahora del socialismo español, sopló al oído de Pedro Sánchez que creara un puesto de florero, el consejo para la transición industrial y energética, para el presidente del Principado lo que, menos mal, le da derecho a asistir a las reuniones de los órganos superiores de su partido. El resto de la representación asturiana queda en manos de la incombustible María Luisa Carcedo que llevará Bienestar Social, y de Adriana Lastra para política municipal.
Bien, tras el fallido desembarco de los socialistas asturianos en Madrid supongo que este mediodía habrán tomado el autobús de regreso a la madre patria regional. Tal como se han desarrollado las cosas pienso que a partir de ahora la persona de confianza de Pedro Sánchez y Susana Díaz en el Principado será el ex de muchos e importantes cargos, actual diputado, Antonio Trevín. El jefe del ejecutivo tiene ahora que sentarse a la mesa y encarar de una vez por todas la problemática situación de esta región asturiana que cada vez está más abajo en el ranking federal ese que quiere el nuevo secretario general socialista para España. Para empezar creo que el gobierno asturiano debe decidir conceder este año para la fiesta de la comunidad en septiembre la medalla de oro de la misma a la Reina de España la ovetense Letizia Ortíz, nacida del pueblo y para el pueblo. Hace más de 700 años que los asturianos no tenemos una Reina de España nacida en nuestra tierra así que la ocasión la pintan calva. Es más, creo es de justicia dada la vinculación que la Corona española tiene con Asturias. Quedo, pues, a la espera de la decisión de Javier Fernández y su gobierno que en definitiva es el nuestro.
Pedro Sánchez lo dijo alto y claro: Hay que salir más de los despachos y visitar los lugares donde los ciudadanos dolientes esperan de nuestros, en gran parte, inoperantes políticos solución a sus problemas. El primero en hacerle caso, según mi espía preferida la XPXIII, es el presidente de la Junta General del Principado Pedro Sanjurjo que el miércoles visitará por vez primera el concejo de Cudillero, único de Asturias actualmente regido por una gestora -su titular Olga Fernández lo está haciendo muy bien- y en donde el PSOE pretende arreglar la situación cara a las próximas elecciones municipales, situación de la que son culpables los suyos con el que fue alcalde Francisco González “Quico” a la cabeza. Además de ser recibido en el ayuntamiento, cronista oficial Juan Luis Alvarez del Busto incluido -solo le han invitado a un acto oficial dos veces en 41 años-, dará un paseo por el puerto y, supongo, visitará también la finca de las Selgas que merece la pena.
Ya que me refiero a Cudillero no puedo por menos de enviar un abrazo fraternal y solidario a mi admirado colega José Luis Balbín quien hace unas fechas sufrió un serio patatús mientras se encontraba en Venecia. Logró ser trasladado a Madrid a los pocos días donde se repone habiendo respondido muy bien al inicio de la rehabilitación. En cuanto retorne a Cudillero y respire los aires del Cantábrico estará, seguro, en condiciones de fichar por el equipo de fútbol local. Animo, maestro.
Por fin Avilés tendrá a partir de mañana nueva cronista oficial. La profesora Pepa Sanz tomará posesión del cargo, vacante desde el fallecimiento de Justo Urueña, mañana a mediodía ante la alcaldesa Pilar Varela. Creo que asistirá la consejera de Cultura Ana González a la que algunos cronistas locales, invitados al acto, le plantearán que Asturias necesita ya tener cronista oficial, cargo vacante desde hace años, desde que murió el gran Joaquín Manzanares. No estaría de más que Asturias contase para finales de septiembre con cronista oficial ya que en la última semana de ese mes los cronistas oficiales de toda España celebrarán asamblea en Oviedo.
Se me olvidaba, espero con verdadero interés las fotos del alcalde de Oviedo Agustín Iglesias Caunedo vestido de vaqueiro en el alto de Aristébano. Cuando las vean en Harvard quedarán con la boca abierta.
