El mar está compuesto de una enorme cantidad de gotas. La humanidad está compuesta de una enorme cantidad de personas. Tanto el mar como la Humanidad tienen el poder de crear y de destruir. El mar en calma no hace daño, el mar embravecido sí. La Humanidad que tiene el alma limpia es como la mar en calma, no hace daño. La Humanidad que tiene el alma sucia de odio hace daño igual que la mar embravecida. Sólo con el alma limpia de odio podremos acabar con las guerras criminales y lograr la paz del mundo. Intentemos todos limpiar el alma nuestra. Lo necesitamos desesperadamente.