Son sin duda alguna las personas que están en boga entre todos los españoles estos días. Bien, es cierto por motivos distintos. Eso sí, tienen un nexo en común: lo que representan son cargos heredados.
D. Juan Carlos I abdica en su hijo, la corona. Y Luis Aragonés cede la selección nacional a Vicente Del Bosque.
Nuestro Rey actual Felipe VI ya esta lo suficiente preparado para desempeñar su papel. Los caminos en ambos casos ya estaban trazados. Al Rey, le pido por el bien general, que atine en sus decisiones y busque soluciones cuanto primero mejor. El pueblo español vive en el Siglo XXI y a él le toca abrir este país al futuro. Esta muy bien, que el primer encuentro sea con las víctimas del terrorismo y su primera visita al igual que lo hiciera su padre sea a Cataluña, son guiños oportunistas pero la prioridad es el rebajar las colas de las puertas del Inem.
Muchos que acudieron a verle y aplaudirle por las calles de la capital de España, en el bolso de llevar o trasero del pantalón llevaban la cartilla del paro. Contra ese problema hay que poner remedio...ya!
En cuanto al Sr. Marqués, éste ni esta ni estuvo preparado nunca. Fue un jugador mediocre, sin talento alguno, apático y frío (lo que transmite) que tuvo la fortuna de pertenecer al Real Madrid. Comentarista deportivo y poco más en su menguado currículum. Dirán los palmeros de turno que gano una Eurocopa y un mundial de fútbol... con qué mimbres ? Los que dejo su antecesor Luis Aragonés, éste sí que lo dejo atado y bien atado. Genio y figura.
De la etapa anterior en seis años, de los 23 jugadores que se llevó a Brasil, 17 eran los pupilos del sabio de Hortaleza, el único título honorífico que se llevo a la tumba y se lo puso sus paisanos. Vergüenza torera sentí Sr. Marqués viendo a los nuestros, como el legado ya no da más para sí, se le acabo el filón, mira que hay savia nueva y joven, pues erre que erre a vivir del pasado. Si de verdad quiere hacernos un enorme favor, no espere mas...dimita. Ya esta mas que pagado en dinero y con un título nobiliario que éste si puede quedárselo como adorno.
Les cuento algo personal para poner punto y final. Estos días, la gota se presentó en mi casa sin invitación alguna y ando fatal -nunca mejor dicho- Entre el colchimax y tanto estrés me brota el mal humor, fruto lo que leen.