Ayer publicaba "El País" bajo el título de "Quién es quién en la cima del poder" la vida y obra de 35 de los directivos de otras tantas empresas cotizadas y que conforman el Ibex 35 del mercado español. En el selecto grupo -solo dos son mujeres- hay de todo en lo referente a formación: ingenieros, abogados, economistas, físicos, profesores, químicos..., hasta uno de ellos, Lakshimi Mittal, presidente y consejero delegado de Arcelor Mittal, figura como el típico empresario de los que se dice que "está hecho a si mismo". Según "El País" el sueldo anual conjunto de esos 35 empresarios (sin contar la aportación a los planes de pensiones, supongo) suma la astronómica cifra de 82 millones de euros, que son lo mismo que 13.644.000.000 de las antiguas pesetas (trece mil millones seiscientas cuarenta y cuatro mil pesetas). O sea, el sueldo medio anual de estos 35 "angelitos" es de 2,3 millones de euros, que son lo mismo que 389.800.000 de las antiguas pesetas (trescientos ochenta y nueve millones ochocientas mil pesetas).
Hervé Falciani, el informático empleado en el banco HSBC, que reveló las cuentas suizas de un buen número de "honorables y honrados" españoles que incumplían sistemáticamente sus obligaciones con la Hacienda de nuestro país, declaraba estos días -con conocimiento de causa- que son más de cuarenta mil millones de euros los que salen cada año de España hacia los llamados "paraísos fiscales".
Es de general conocimiento que más del 80% de las empresas que componen el selectivo Ibex 35, precisamente las que presiden los "angelitos" de los que escribí anteriormente, tienen sucursales, oficinas de representación, o todo tipo de colaboradores, en los citados "paraísos fiscales". ¿Será por interés nacional? o ¿será por estrategia empresarial?. En todo caso ¿será para defraudar?.
La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, el martes, se vio un tanto acorralada o falta de reflejos en el Parlamento cuando la portavoz socialista,Soraya Rodriguez, le acusó de haber cobrado sobresueldos (hasta 600.000 euros) del Partido Popular. Ya fuera del hemiciclo, ante varios periodistas, le salió la vena del bajo proletariado y dijo que "en mi puta vida he recibido un sobre". Dejando a un lado que los altos cargos del Partido Popular llevan soñando desde hace años con sobres y sobresueldos y que, a veces, el subconsciente les traiciona, lo que nadie hasta ahora habría podido sospechar es que la vida de la vicepresidenta hubiera sido tan puta. Es tremendo, da un poco lástima.
Esta estafa llamada crisis está hasta cambiando los papeles de cada cual en nuestra sociedad. Al final, los empresarios del Ibex con sus salarios bochornosos y sus empresas en "paraísos fiscales", y los políticos que tanto les protegen, con sus sueldos y sobresueldos, todos llevan una vida muy puta. Mientras, los hambrientos, los parados, los recortados, los dependientes abandonados, todos esos jóvenes sin futuro y desesperados, todos, son quienes se quejan por vicio porque siendo defraudadores, egoístas e insolidarios, no llevan una vida puta y viven de puta madre.