La nación Española lleva en sus venas el ayudar al prójimo y somos uno de los países más solidarios del mundo, eso hace que muchas veces muchas vidas dependan de esta ayuda para sobrevivir, sobre todo en los momentos actuales de aumento de pobreza.
Estos días la campaña de recogida de alimentos es un éxito y más del voluntariado silencioso, que lo entrega todo a cambio de nada. Pero lo triste es que nuestros políticos se olvidan de hablar de esto en los mítines que realizan todos los días, que estarán jodidos de pasta pero no se les nota, con tanto parlanchin suelto.
Si fueran conscientes de los sacrificios de la ciudadanía, como tanto cacarea el presidente de la nación, obligaría cortar tanto acto político de mierda que celebran todos los fines de semana y ese dinero lo podían entregar para paliar el hambre de esta nación, que generaron y generan todos ellos, son ellos los culpables de este desastre nacional, por pasear su ignorancia y su avaricia personal.
En las crisis solo las castas salen beneficiadas, ya paso en la edad media y sigue pasando ahora, los ricos, los políticos y el clero son los únicos que no pasaran hambre. El sistema está diseñado para ellos, no nos engañemos, si somos solidarios, pero al mismo tiempo incoherentes en los actos, recogemos toneladas de alimentos, miren para el carro de lo que compran y solo verán que les estamos haciendo el juego a las multinacionales de la alimentación, pregúntense donde lo compramos? Que marcas metemos al carro y en que bolso repercutirá nuestra solidaridad.
Estas empresas tiran millones de kg de comida al día, encima ya no las sacan a los contenedores para que la gente no las recoja delante de sus establecimientos, planifican todas las estrategias de la caducidad de los alimentos para aumentar el consumo, juegan con la alimentación a nivel financiero con futuros, son parte de la estrategia de reducción salarial para aumentar sus beneficios, manejan a su antojo los precios de la alimentación a nivel mundial, podrían bajar los precios viendo la situación, pero les importan muy poco las personas y a veces incluso sus mismos clientes.
Pero cambiemos el chip, compren directamente al productor que también estará pasándolo mal, debido a la agresividad de estos centros, con ello aumentaremos que los agricultores ganen algo más de dinero por su cosechas, eliminaremos especuladores e intermediarios, quedara la riqueza en nuestra región, crearemos puestos de trabajo y generaremos la verdadera solidaridad, que está basada en un circulo de buenas prácticas.
Podemos ser mucho más solidarios, si entendemos que muchas de estas grandes empresas son parte de esta gran estafa, la alimentación a nivel mundial la mueven cinco multinacionales, las cuales se benefician de los mercenarios políticos para hacer su agosto particular.
Piénsenlo, siempre salen ganando los mismo! Ellos la generan y a ellos se la compramos.
Es muy triste, pero es la realidad